Felipe IV hablándole a un cuadro de Velázquez
FELIPE IV HABLÁNDOLE A UN CUADRO DE VELÁZQUEZ
UNA ANÉCDOTA DE PALACIO PARA HISTORIADORES DEL ARTE
Este es el retrato del bizarro madrileño Don Adrián Pulido Pareja, General de Mar y Tierra y Caballero de la Orden de Santiago. El retrato se le atribuye a Juan Bautista Martínez del Mazo. Nosotros no somos críticos de arte, ni nos creemos con autoridad para cuestionar la atribución del cuadro, pero sí que queremos recordar cierta anécdota que está registrada por escrito y que haría pensar que tal vez el cuadro haya que atribuirlo a Velázquez. Se trata de un episodio ocurrido a Felipe IV de España en Palacio. Así nos lo cuenta D. José Álvarez y Baena, en un libro que, por olvidado, tal vez no hayan consultado los especialistas en Historia del Arte:
"Don Adrián Pulido Pareja nació en Madrid, hijo de Joseph Pulido Pareja, natural de Olias, a dos leguas de Toledo, y de Doña Ana Ramírez de Arellano, que lo era de esta Corte. Por los años de 1639, le concedió el Señor Don Felipe IV, el empleo de Capitán General de la Armada de Nueva España, estando en la Corte a sus pretensiones. Entonces fue cuando le retrató el célebre Velazquez al natural tan parecido, que aseguran que estando acabado y puesto hacia donde había poca luz, bajó el Rey al taller de Velázquez, y juzgando ser el mismo Don Adrián, le dijo con extrañeza: "¿Qué... todavía estais aquí? ¿No te he despachado ya? ¿Cómo no te vas?" Hasta que notando que no correspondía, conoció ser el retrato, y volvió su Majestad a Velazquez diciendo: "Os aseguro que me engañó". Este retrato tan peregrino paró en poder del Duque de Arcos.
En consideración a los servicios de Don Adrián le hizo Su Majestad merced del Hábito en la Orden de Santiago en 12 de Febrero de 1647, y el Real Consejo de las Órdenes le mandó dar Título en 7 de Octubre del mismo año. El de 1658 por decreto de 23 de Diciembre le hizo merced de otro Hábito en la misma Orden para la persona de un hijo, el que nombrase; y él lo hizo en la de Don Adrián Pulido, que no se le puso hasta el año 1680. Sirvió muchos años su empleo, pues en 660 trajo a su cargo una flota muy considerable. Tuvo por esposa a Doña Francisca Fernández Zorrilla, hija de Matías Fernández Zorrilla, Secretario del Rey, ambos naturales de Madrid, y de Doña Prudencia Barruela, natural de Miranda de Ebro."
Tomo Primero del libro "Hijos de Madrid: Ilustres en santidad, dignidades, armas, ciencias y artes. Diccionario Histórico por el orden alfabético de sus nombres", de Josef Antonio Álvarez y Baena, Madrid, año de MDCCLXXXIX.
Felices tiempos en los que los pintores eran capaces de reflejar la realidad como un espejo... Y los Monarcas eran capaces de reconocer que se habían equivocado sin darse alharacas. Hoy en día apenas hay pintores... Y Monarca: ¡Estamos esperándolo!
LIBRO DE HORAS Y HORA DE LIBROS se complace, como siempre, en suscitar el debate, esta vez artístico, sobre una obra que está en la National Gallery de Londres. Nada sorprendente que, como tantas obras pictóricas y artísticas españolas, esté en museos extranjeros, dada la rapiña que nuestro tesoro artístico ha sufrido por culpa de la incuria española y de la rapacidad extranjera.
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