Poesía: ROMANCE DEL REY DON RODRIGUEZ

ROMANCE DEL REY DON RODRIGUEZ

Holgaba el rey don Rodríguez,
don Rodríguez Zapatero,
por las frondas de León
con sus fieles mesnaderos.

El Abad Pepiño el Blanco,
que es el su Palanganero,
y el morisco Rub-al-Qaaba,
otro que es de aquí te espero.

Y asentía Don Pumpido,
Conde Cándido entero,
las razones esgrimidas
por los fieles zapateros.

Daba el rey su parecer
a tan nobles caballeros,
que non tiénelas consigo
que el su Reyno llegue a enero
pues está tocando al arma
el enemigo Pepero.

”¡Voto a tal -diz Pepe el Blanco-
que eres, Rey, un agorero!
Os lo he dicho muchas veces:
gana el que pacta primero.”
Que la clave está en pactar,
con Cristo o con Lucifero.”

“¿Non tenedes Catalunia,
con Carod de telonero?
Y a las orillas del Miño,
Anxo Quintana es palmero
del vuestro Duque Touriño."

"Buen Pepiño -dizle el Rey-,
¡mi leal Palanganero!
La tu faz es tan falsaria
como un billete de euro."

"Mas, por mi real talante,
que tu consejo es certero:
¿Debo tentar a Ib Arretxe,
ese pirata agareno,
y sumar nuestros esfuerzos
en un pacto torticero?"

“Que aunque tengo más recodos
que el famoso Maquiavelo,
me se ponen como escarpias
cuando piénsolo, los pelos.”

Respóndele el Pepino
al su rey, muy zalamero:
"Ib Arretxe es un don nadie
que a mi lado non lo quiero."

"De tratar con un pirata
ha de ser con el más fiero.
Donde dícese pirata
hágase Batasunero.”

Se rascaba la cabeza
al oírle, Zapatero:
"Me dejades de una pieza
de los pies hasta el sombrero.
¡Qué maldades non discurres,
mi perrillo perdiguero!"

“Si jugamos esa carta,
enseñamos el plumero.
Hará falta, por lo menos,
amañar un alto el fuego."

Aquí fabla Rub-al-Qaaba,
el de calva como huevo:
"Mi señor, non te me apures.
Esos hilos ..., yo los muevo.
Treguas, trampas, trapos sucios ...
para mí no es nada nuevo.”

“Si me faces la merced
de Supremo Cuartelero ...
yo le lavo la chilaba
al peor batasunero.”

Diz el Conde Don Pumpido,
que es un conde pelotero:
"Si lo mandas, Don Rodriguez,
yo, que soy tu mandadero,
le pondré puente de plata
al enemigo más fiero.”

Contestándoles a todos,
mira y dice Zapatero:
"Tender puente al enemigo
es un truco ya muy viejo.
Suele ser porque se vaya,
preferiblemente lejos.”

”Mas, tendello por que entre ...
¡Vive Dios que es truco nuevo!
¡Por mi Reyno y mi Talante,
vais a ver como lo pruebo!”

"Entre ambos repartimos
y entre ambos mandaremos,
que la plebe no se entera
que le mangas los bolseros."