ETA mantuvo la exigencia de la «anexión» en sus dos últimos documentos

ETA mantuvo la exigencia de la «anexión» en sus dos últimos documentos

J. M. Zuloaga


Madrid- ETA, en los dos últimos pronunciamientos públicos, ha reiterado su «doctrina» sobre Navarra. La amenaza latente de la organización criminal, que no ha manifestado voluntad de entregar las armas y desaparecer, la convierte en el «guardián» del cumplimiento de los objetivos estratégicos por cuya consecución lleva cuarenta años causando muerte y destrucción. El atentado del pasado 30 de diciembre contra el aeropuerto de Barajas demuestra cómo entiende la banda el «proceso de paz» y cómo está dispuesta a «corregir» cualquier desviación o incumplimiento de los fines establecidos.

En el comunicado que ETA hizo público el pasado 9 de enero, el que se hacía responsable del citado atentado y de las dos muertes que causó, señalaba que había que reconocer «los derechos nacionales de Euskal Herria y superar la división territorial que se impone actualmente». «Para ello -agregaba-, es preciso acordar y construir para Euskal Herria un nuevo marco jurídico político fundamentado en el derecho de autodeterminación y territorialidad». Independencia del País Vasco con la anexión de Navarra, dicho en términos comprensibles para todo el mundo.

En su publicación, el «Zutabe» 111, del pasado mes de diciembre, hacía un llamamiento para hacer una defensa «fogosa» y «como nunca en la calle, de los derechos de autodeterminación y territorialidad». ETA subrayaba que los «soldados vascos no llevan tantos años luchando para mantener los territorios vascos diseminados entre administraciones extranjeras».

Ambos pronunciamientos se sitúan en lo que ha sido la «doctrina» oficial de ETA y, por lo tanto, de su brazo político, a lo largo de su siniestra historia. Según las conveniencias de cada momento, y de la fuerza o debilidad del Gobierno central, han disfrazado estas exigencias con nombres de «alternativas» o con el ropaje de supuestos respetos a la democracia.

La realidad, según expertos antiterroristas, es que ETA, que es la que toma las decisiones, no ha variado su postura respecto a Navarra. Su integración en el País Vasco constituye uno de sus objetivos estratégicos irrenunciables. Para tratar de conseguirlos ha utilizado las armas y, en ocasiones, como ahora, la negociación. Mientras ETA no desaparezca, con su amenaza patente o latente, no es posible considerar propuestas de su brazo político, ya que, como ocurrió el 30 de diciembre en Barajas, puede hacer valer su fuerza en cualquier momento.


http://www.larazon.es/noticias/noti_nac28358.htm

Evidente, en su imaginaria Euskalherría, Navarra forma parte de la "nación de vascos".
Aprovechando la confusión y debilitamiento de la sociedad española planeada en contubernios masónicos y rojos, como el Pacto de Tinell, etc.
Navarra no es Euskadi. Euskadi no existe, tan sólo en la mente enferma de Sabino Arana, Psicópata parafílico y demente racistoide.
Los vascos abertzales no son los vascones de antaño.
Todo es una bazofia mentirosa masónica vergonzosa para una nación centenaria como la española.
Hasta cuando debemos aguantar a estos despojos politicastros?