Estas son las famosas treguas de ETA...
Esta debe ser la forma de dialogar de ETA...... a ver que dice Zapatero (es decri Patxi Lopez, Maragall y cia...)
Tres heridos leves al explosionar un coche bomba de ETA en Madrid
El atentado se produce tras una llamada al diario GARA, en nombre de ETA, que alertaba de la colocación de un artefacto en la calle Rufino González
Tres personas han resultado heridas leves tras la explosión de un coche bomba a las 9.30 horas en la calle Rufino González, próxima a su confluencia con la calle de Alcalá, en el barrio madrileño de San Blas. La deflagración se ha producido junto a una gasolinera y la boca de metro de Suances. Al parecer, tres personas ha resultado heridas leves. El atentado se ha producido tras una llamada al diario Gara, en nombre de la organización terrorista ETA, que alertaba de la colocación del artefacto en esa calle.
Zapatero dice que el objetivo del Gobierno es "combatir y acabar con el terrorismo"
La zona, en la que se encuentra una salida del metro de Suances, ha sido acordonada por las fuerzas de Seguridad poco antes de la explosión, lo que ha evitado consecuencias mayores. Dos de los tres heridos eran trabajadores de un concesionario de la marca Opel junto al cual fue aparcada la Renault que ha hecho explosión.
Uno de ellos ha sufrido una contusión torácica, mientras que el segundo ha resultado afectado con una herida en la cabeza y diversos daños en las manos y la cara. Según otras fuentes, uno de los heridos podría ser un vigilante de la citada empresa, mientras que el otro sería un comercial. El tercer hombre, al parecer ajeno al concesionario, ha sufrido una contusión en un tobillo y varias heridas en las manos y la cara.
El comunicante anónimo había especificado en su llamada que el vehículo que albergaba la bomba era una furgoneta Renault y que la explosión sería a las 9:30, hora en la que se registró. La Policía ha informado de que el artefacto se encontraba en una mochila y que el vehículo había sido robado anoche.
Una densa columna de humo se ha podido ver desde diversas zonas de la ciudad. Poco después del atentado, el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, había reiterado en el Senado que el objetivo del Ejecutivo es "combatir y acabar con el terrorismo" y que el único destino de ETA es abandonar las armas y disolverse.
Según informa el diario ABC.es, empleados de una empresa de electrónica de la calle Rufino González, así como de un taller de coches situado en el número 5, han indicado que a las 9,30 horas se produjo una sola explosión y que, previamente, nadie les previno. Únicamente, ha explicado uno de los trabajadores, "la voz se corrió entre los compañeros para que no nos moviéramos de las oficinas, pero sin ningún aviso por megafonía ni nada de ese estilo".
Un gran despliegue policial, incluido un helicóptero, protege un perímetro de unos 500 metros alrededor del punto donde se produjo la explosión, una zona donde se acumula una gran cantidad de pequeñas empresas e industrias.
Segundo atentado en Madrid en 2005
El pasado 9 de febrero, ETA hizo explotar un coche bomba cargado con unos 30 kilogramos de cloratita, a las 9.35 horas, en las inmediaciones del recinto ferial Juan Carlos I (IFEMA), horas antes de que los Reyes y el presidente mexicano, Vicente Fox, inauguraran la feria internacional de arte Arco. El estallido, que vino precedido de un aviso por parte de un comunicante anónimo al diario Gara, provocó daños materiales en uno de los dos edificios de las Esferas Gemelas, donde tienen sus oficinas la empresa de informática Bull y la firma Steria.
El pasado 18 de enero, la banda terrorista ETA hizo estallar un coche bomba cargado con 40 kilogramos de explosivo en una zona residencial de Getxo (Vizcaya). En el atentado, un agente de la comisaría de Getxo resultó alcanzado en una mano y en la cara por la detonación cuando participaba en el cordón de seguridad.
Estas son las famosas treguas de ETA...
Ya son dieciocho los heridos en el atentado con mochilas bomba de ETA en Madrid
(Libertad Digital) La Policía se tomó en serio la posibilidad de que el coche situado en la confluencia de las calles Alcalá y Rufino González contuviera artefactos explosivos tras consultar con los propietarios del vehículo para confirmar si era de ellos dos mochilas que podían observarse en el interior del vehículo, según informaron a Europa Press en fuentes policiales. Las mismas fuentes indicaron que la Policía tuvo conocimiento de que el diario Gara había recibido sobre las 8,45 de la mañana una llamada indicando que a las 9,30 iba a estallar un coche bomba en Madrid, en la calle Rufino González, por lo que se establecieron los dispositivos de seguridad pertinentes.
Cuando llegaron los primeros vehículos policiales comprobaron que había una furgoneta Renault Express que había sido robada la noche anterior, dentro de la cual, según Europa Press, había dos mochilas visibles. Inmediatamente localizaron a la propietaria del vehículo y le preguntaron si las mochilas eran suyas, y al decir ésta que no, acordonaron la zona y desalojaron a las personas del entorno.La furgoneta Renault fue robada por los terroristas en la localidad madrileña de San Lorenzo del Escorial y los etarras ni siquiera cambiaron la matrícula. Según informó en el Senado el ministro del Interior, José Antonio Alonso, los TEDAX estiman en una valoración inicial que el explosivo con el que fue cargado el coche oscila entre los 18 y 20 kilos.
BOMBA-TRAMPA. A pesar de que la llamada a Gara avisaba que el coche iba a explotar a las 9,30, lo cierto es que lo hizo poco antes de esa hora y causó importantes desperfectos en la zona, en especial en un concesionario automovilístico (Opel) que se encontraba en las inmediaciones. Así, la explosión se produjo en pleno desalojo del contiguo Edificio Aragón, un inmueble en el que trabajan unas 200 personas, y que alberga concesionarios de automóviles de las marcas Opel y Land Rover, asi como sedes de la empresa de telemarketing Bouncopy, de Citibank y de Unisono Soluciones.
Una representante de CCOO en el comité de empresa de Unisono relató a Europa Press que pudieron ver desde la cuarta planta, minutos antes de la explosión, cómo la policía instalaba un cordón de seguridad en la calle, pero no lo atribuyeron a la posibilidad de un atentado terrorista. Poco después, una responsable de la compañía fue alertando planta por planta de la situación, advirtiendo de que "no se trataba de una broma", y explicando que el desalojo sería ordenado y planta por planta. Los empleados de los pisos primero y segundo pudieron salir a la calle. Cuando desalojaban los de los pisos superiores tuvo lugar la explotación, cuya onda expansiva empujo al interior del edificio a algunas personas que intentaban salir en ese momento. Al parecer, ningún trabajador del edificio resultó herido pero sí se produjeron crisis de ansiedad, según aseguraron a Europa Press las mismas fuentes.
HERIDOS. Son ya dieciocho las personas atendidas en el hospital de campaña instalado por el Samur-Protección Civil en el lugar donde se produjo la explosión de un coche bomba, en la confluencia de las calles Rufino González y Alcalá, informó a Europa Press un portavoz de Emergencias Madrid. Entre ellos hay algún miembro de la Policía Nacional. Las fuentes informantes indicaron que no descartan que a lo largo de la mañana aumente el número de afectados por la onda expansiva, fundamentalmente por sufrir el llamado "blas timpánico" que provoca dolores en los oídos y que se manifiesta en las personas que han permanecido en las proximidades de una fuerte detonación.
Entre las personas que han sido atendidas en el hospital de campaña del Samur figuran vecinos de las casas situadas en la calle donde estalló el coche bomba, trabajadores de establecimientos de la zona y agentes de policía que participaban en las labores de acordonamiento del lugar. Por lo que respecta al herido de carácter moderado, que fue trasladado al hospital 12 de Octubre, se trata de un hombre de 42 años de edad, empleado del concesionario de la firma automovilística Opel que está frente al lugar de la explosión.
La sede del teléfono de información 012 de la Comunidad de Madrid, situada en la confluencia de la calle de Alcalá con Rufino González, fue desalojada, lo que impidió que el servicio se prestara con normalidad en las primeras horas de la mañana. El alcalde de Madrid, Alberto Ruiz Gallardón, interrumpió la visita que se encontraba realizando al edificio Windsor para desplazarse a la calle de Rufino González donde se produjo la explosión. El alcalde presenciaba las obras de demolición del edificio Windsor cuando tuvo noticia de la explosión.
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