Camelots du Roi”.
by Pascual Albert

Los “camelots du Roi”, aparecen los primeros años del Siglo XX y son primordialmente vendedores voluntarios de la prensa monárquica, en calles, plazas, estaciones y puertas de las iglesias. De ahí les viene su nombre, que en principio utilizaron sus adversarios en tono irónico y que muy pronto fue adoptado por ellos orgullosamente, hasta elevarlo a categoría legendaria en 2ª Francia de la 3ª República.

Formados por elementos de todas las clases sociales y de todas las edades, no fueron nunca el equivalente a las “Juventudes”, que en la Acción Francesa, no existieron nunca. Tampoco estuvieron nunca organizados como formación paramilitar, podríamos decir que fueron los inventores de “la guerrilla urbana”, siendo su estructura la de equipos y grupos. Melchor Ferrer, dice que D. Jaime se inspiro en ellos para ordenar la reorganización del Requeté, pero como no podía ser de otra manera, la historia militar del Carlismo le confirió el carácter y organización que tuvo y que hizo del Requeté la milicia más numerosa y aguerrida en los primeros y más decisivos meses de 1936.

Los “camelots du roi” a sus funciones de propaganda y venta de “L´Action Françaire”, pronto incorporaron la de constituirse como servicio de orden en mítines y manifestaciones propias, escolta de los responsables de AF, guardia de locales, periódico e imprenta, rompedores y boicoteadores de los actos de los adversarios de toda clase y muy particularmente ser la estructura aguerrida y disciplinada que movía a miles de manifestantes que acudían a la llamada de L´AF.

El “asunto Thalamas” (de un profesor que intento en la Sorbona, hacer un curso insultante contra Juana de Arco) les dio a conocer al gran público, y en su dilatada historia destacan: las campañas para ampliar la ley del servicio militar de 2 a 3 años, vísperas de la 1ª Guerra mundial, la imposición a la República de la Fiesta a Juana de Arco, como símbolo del patriotismo francés, que se celebra el 2ª domingo de Mayo, las luchas contra el pago de las deudas de guerra a Estados Unidos o a favor de la intervención militar francesa en el Ruhrr, así como las épicas jornadas con motivo del escándalo Stavisky, que culminaron el 6 de febrero de 1934.

Para ser “camelot du Roi” era necesario ser miembro de la “Liga d´AF” o de los “Etudiants d´AF” y aceptar un grado de compromiso militante superior al de otros afiliados. Con el tiempo, dentro de los “camelots” se creo un grupo de elite, llamados los “Comisarios d´AF” con un grado de compromiso y disponibilidad casi total.

En lo que concierne a la guerra de España, es evidente que “La Acción Francesa” galvanizó a los intelectuales y opinión derechista a favor de la España nacional, consiguiendo una mayor eficacia en el bloqueo y la neutralidad efectiva por parte de Francia –que no hay que olvidar que tenia entonces un gobierno de Frente Popular- por lo que fue de una gran ayuda.

Sin embargo, en la participación en hombres, es cierto que al principio y para contrarrestar la movilización comunista de las “Brigadas internacionales”, desde el entorno de la Acción Francesa, se intento movilizar y formar una Brigada que se llamaría “Juana de Arco”. Pero la verdad es que Maurras y los dirigentes del movimiento, muy conscientes del panorama internacional, boicotearon discretamente la iniciativa porque entendían que la sangre francesa iba a ser muy pronto necesaria para defender su patria. Así y todo decenas de “camelots du roi” vinieron a nuestra patria e integrados la mayoría en Tercios de Requetés participaron en nuestra cruzada de liberación.

Con sus jefes históricos: Maxime Real del Sarte (escultor), Marius Plateau (empleado de seguros, asesinado por una anarquista en 1923), Lucien Lacour (carpintero) fueron destacados “camelots du Roi”: el escritor y novelista George Bermanos, Marcel Wiriath, que llegaría a ser PDG de “Credit Lyonnais”, Engene Deloncle, ingeniero y fundador de “la Cagoule”, Jacques Renouvin, padre de Bertrand Renouvin director de ”Royaliste”, fundador de los Cuerpos francos del grupo de Resistencia “Combat” y muerto en deportación, Henri Charbonneau “Porthos” que eligió el camino opuesto y lucho con la “Milicia”, Pierre Guillain de Benouville que llegaría a general, y que hizo una larga carrera política como diputado en la onda “gaullista” sin dejar nunca de ser monárquico, su intimo amigo eurodiputado del Frente Nacional Michal de Camaret, Pierre Juhel que siguiendo las ordenes de Maurras reorganizo la Acción Francesa, después de la 2ª Guerra Mundial con Maurice Pujo y Georges Calzant, fundando “La Restauration Nationale” y un larguisimo etc, de personalidades brillantes en numerosos campos.