Eso han juzgado los organizadores de los JJOO de Pekín (no me da la gana latinizar el nombre chinorro) de 2008. La ¿noticia? viene en 20minutos.es de fecha de ayer, 13 de octubre.

Han publicado una especie de decálogo de objetos prohibidos: vasos, instrumentos musicales, banderas de ciertas dimensiones... y, La Biblia y El Crucifijo por ser peligrosos. ¿Para quién? por supuesto para estos tiranos que han venido aplastando al pueblo chino desde la IIGM. No contentos con ello, estos servidores del diablo, prohiben cualquier manifestación de fé por parte de los atletas, preparadores, periodistas, etc. Confío en que habrá deportistas, pocos supongo, que declinarán su asistencia ante tal ejercicio de tiranía de estos mierdas de sátrapas. Espero, igualmente, que algún gobierno haga lo propio y retire su delegación, y en esto confío en Polonia.

Por supuesto, ¡ojalá se les indigesten sus juegos! Desde hace tiempo venía siendo reacio a comprar productos procedentes de este país: mala calidad, peligrosos según se ha venido demostrando en juguetes y hasta en pasta de dientes, peligrosos para nuestra economía y, en consecuencia, para nuestra industria y comercio...

Pues bien, desde hoy mismo no pienso volver a comprar nada que proceda de ese país. "Es que cuesta 100 euros y su equivalente, 600" No importa, si no lo puedo pagar hoy, lo haré dentro de... el tiempo que haga falta.
Además, iré transmitiendo este boicot total a toda persona que me quiera escuchar y así hasta que caiga el Mal que representa ese régimen, hasta que se precipite en los abismos.

Os pido que hagaís lo mismo.