¿Donde nace el Guadalquivir?

¿Donde nace el Guadalquivir?

Siempre se ha considerado que el Guadiana Menor es el río que vierte sus aguas al Guadalquivir, pero según la teoría de Jesús Tejero, especialista en geografía andaluza, el Guadiana Menor mantiene realmente su cauce; el río que nace en la Sierra de Cazorla, el Guadalquivir tradicional, sería un afluente del Guadiana Menor.

Un río, dos fuentes.
Cañada del Salar, donde también nace el Guadalquivir. Hasta que los geógrafos se pongan de acuerdo sobre el contencioso de las fuentes del mayor río andaluz, una buena solución de compromiso sería considerar que sigue habiendo un sólo río Guadalquivir pero con dos brazos distintos en su origen, lo que permitiría mantener dos nacimientos: el descubierto en la Cañada del Salar y el situado en la Cañada de las Fuentes, Jaén. Si hablar de dos "guadalquivires" no es una aberración científica, esta propuesta evitaría más polémicas estériles. Algunos ríos de gran caudal, como el Rin alemán, llegan a su desembocadura en cauces diferentes y con nombres distintos: el brazo norte del Rin se convierte al entrar en Holanda en el Canal de Pannerden antes de ser rebautizado como Bajo Rin, primero, y como Lek en los últimos kilómetros antes de desembocar en el Mar del Norte; el brazo sur del Rin es el Waal, que mantiene su nombre hasta su desembocadura. En el caso del Guadalquivir sería al contrario: los dos brazos estarían en la cabecera del río. El primer Guadalquivir sería el tradicional, que nace en la sierra de Cazorla, en Jaén. El que tiene su origen en Topares, Almería, y desemboca en el Océano Atlántico, articulando así todo el territorio andaluz, podría llamarse "Guadalquivir oriental" conservando además los nombres actuales de su recorrido, empezando por el de Guadiana Menor. Sería una forma de reinventar el río, sin cambiarlo de sitio, reconociéndole aún más su importancia.

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El cauce más largo.
El río que desemboca en Sanlúcar tendría sus orígenes más remotos en el límite oriental de Andalucía, varios kilómetros al Este de lo que tradicionalmente se ha considerado el nacimiento del Guadalquivir. En un lugar donde se acercan hasta tocarse Almería, Granada y Murcia estarían las fuentes del wadi al-Kabir
en árabes.
Esas "otras" fuentes del Guadalquivir, las más alejadas de su desembocadura, están situadas en el municipio de Vélez-Blanco en las cercanías de una de las
zonas con más vestigios de poblaciones prehistóricas autóctonas.
Desde la pedanía de Topares parte un camino sin asfaltar hacia el caserío de Santonge: un paraje protegido por la Unesco que alberga notables pinturas rupestres. A unos tres kilómetros de Topares y a unos cien metros del camino se encuentra el brocal de un pozo. Las aguas que en época de lluvia brotan a pocos pasos del pozo ya pertenecen a la Cuenca Hidrográfica del Guadalquivir.
Este lugar, frecuentemente seco en la superficie, oculta una corriente subterránea que aflora con un modesto caudal cerca de la cañada de Cañepla, donde recibe el nombre de arroyo de la Cañada del Salar. La vegetación que crece junto al pozo, especialmente juncáceas, prueba que hay un caudal subterráneo de agua.

Una última reflexión.
Podría existir una razón político-administrativa por la que se convino, en su momento, que el Guadalquivir, en vez de ser el río Aguamulas o el río Borosa, ambos muchísimo más caudalosos que el llamado Guadalquivir aunque nacidos en la Sierra de Segura, debería nacer en la Sierra de Cazorla por diversas razones.
Primera, la capitalidad del señorío eclesiástico del Arzobispado de Toledo, denominado Adelantamiento de Cazorla, instituido en el siglo XIII por Rodrigo Ximénez de Rada, aunque ello fuera más simbólico y testimonial que otra cosa.
Segundo. En dicha tesitura, Cazorla y sus originarios (cazorleños), muy celosos de ese adelantamiento y siendo el pueblo cabeza de partido judicial, no podía permitir que no existiese constancia de su nombre y de su serranía en el lugar del nacimiento del río andaluz más importante. Evidentemente, a quienes buscaban una ubicación definitiva en que constase el punto donde naciese el referido río, posiblemente les fuese más fácil explorar el Puente de las Herrerías, aguas arriba, hasta llegar a la Fuente de la Cañada en vez de explorar ríos muchos más caudalosos aguas abajo.

Como por ejemplo el río Borosa, que nace en Aguas Negras o el río Aguamulas que nace al pie de Las Banderillas, en un lugar enormemente escarpado. Ambos
ríos están en la Sierra de Segura, cuya capitalidad era y es Segura de la Sierra. Todos esos territorios, de la Sierra de Segura, eran patrimonio y jurisdicción, en su día, de la Orden de Santiago. Naturalmente, el cazorleño hizo lo posible porque el lugar del nacimiento del río Guadalquivir, en vez de en la Sierra de Segura y no digamos en la Sierra de María, en Almería, estuviese en la Sierra de Cazorla. Corregir ahora eso es poco menos que imposible.

2º Polémica antigua.
Anecdótico o sustancial, lo cierto es que la polémica sobre las fuentes del Guadalquivir viene de antiguo. Y si bien ha sido la historia quien finalmente ha fijado la toponimia del río, los avances de la ciencia, las nuevas técnicas geológicas e hidrográficas, sitúan su nacimiento en otro lugar. Y no precisamente en la Sierra de Cazorla.

"Sólo se trata de una precisión científica", señala López Martos al interesarse Diario CÓRDOBA por la cuestión. "Nadie pretende a estas alturas reivindicar otro lugar de nacimiento para el Guadalquivir que el de Cazorla", aclara. De hecho, la teoría expuesta por López Martos no es nueva, aunque nunca ha traspasado los límites de los estudios científicos y académicos, quizá porque, a pesar de todo, no se trata de que ahora haya que cambiar mapas o enciclopedias.

En el libro Guadalquivires -cuyo nombre es lo suficientemente significativo- editado por la propia Confederación Hidrográfica del Guadalquivir en 1977, el historiador granadino Vicente González Barberán escribe: "El Guadalquivir histórico, tal y como lo han estimado las diversas generaciones y culturas, no es único, sino plural". Según González Barberá, el Alto Guadalquivir, desde su nacimiento en la Sierra de Cazorla hasta que se une al Guadiana Menor a la altura de Ubeda, nunca fue considerado por los antiguos como el origen del Betis , como le llamaron los romanos. Es más, los más modernos y precisos geógrafos árabes identificaban la cabecera del Wab el Kebir (Río Grande) con el Guadiana Menor.

Pero al final, razones históricas y políticas llevaron a los cristianos a situar el origen del río en el actual Alto Guadalquivir, ante su imposibilidad de conquistar Baza y las ricas tierras del Guadiana Menor.

Según el erudito granadino, los andalusíes iban bien encaminados, pues "el Guadalquivir técnico -el determinado siguiendo los criterios científicos usados para distinguir el río principal de sus afluentes- es, sin duda, el Guadiana Menor". Los estudios científicos demuestran que el Guadiana Menor es, en términos generales, un río más largo, más bajo y más caudaloso que el Alto Guadalquivir, que sería, en realidad, un afluente más por la derecha de la corriente principal.

El Guadiana Menor cruza la provincia de Granada y llega hasta la Sierra de María, en Almería. Y es en esta última provincia, donde nacería el "Guadalquivir técnico", en la denominada Cañada de Cañepla, en el término municipal de María. La alcaldesa de esta pequeña localidad, Juana Serrano, cree que "de ser así, supondría un revulsivo para el pueblo", por lo que "el Ayuntamiento apoyará cualquier investigación en ese sentido".

Pero las investigaciones, como estamos contando, ya existen. Hasta el punto de que en base a este tipo de estudios, otro pueblo, el granadino Castril, también reivindica para sí el nacimiento del Guadalquivir. Curiosamente, el Nobel José Saramago, cuya esposa es natural de Castril, sitúa aquí, en uno de sus relatos, las fuentes del Guadalquivir. Hace unos días, el director del Instituto del Agua de Andalucía, recibió una llamada de una maestra de Sevilla, porque un alumno suyo había escuchado que el Guadalquivir nace en Almería. "Le expliqué el asunto y me ofrecí para ir al colegio a dar una conferencia", comenta divertido López Martos, que se muestra satisfecho de haber suscitado esta polémica, "porque es bueno que los pueblos conozcan su territorio, sin que por ello tengamos que cambiar algo que ha sido asentado por la historia".

En esto coinciden todos los estudiosos; una cosa es que gracias a la ciencia conozcamos cada vez más y mejor las cuencas hidrográficas, y otra cambiar lo que históricamente ha sido establecido. Algo que también se ha encargado de subrayar el ya citado departamento de Geología de la Universidad de Jaén. Así que, dicho queda: el Guadalquivir nace en Cazorla, el río es jiennense de nacimiento. Al menos desde que Fernando III -al que llamaron el Santo- conquistó aquellas tierras... Y hasta la fecha. 3º {28 Febrero, 2007}

¿El Guadalquivir nace en Almería?
Me he quedado pensando en el día de Andalucía, y me ha dado por poner al día mis recuerdos sobre historia de Andalucía y mi tierra, Almería. Será que me ha dado morriña. Así que estaba yo leyendo la historia de Almería en un ataque agudo de orgullo patrio (del cual os libraré) cuando he leído esto. Cito textualmente: " Discusión sobre el nacimiento del Guadalquivir. Si bien en la actualidad se considera que es el Guadiana Menor el que vierte sus aguas al Guadalquivir, algunos estudios recientes señalan que realmente es el Guadiana Menor el río que mantiene su cauce y que el río que nace en la Sierra de Cazorla es un afluente de aquel. El Guadiana Menor debería ser el auténtico río Guadalquivir, ya que en la confluencia Guadiana Menor-Guadalquivir el primero tiene más longitud y por ende más jerarquía que el segundo, por lo que debería haber conservado su nombre. Remontando el curso del Guadiana Menor, auténtico Guadalquivir desde el punto de vista puramente geográfico, se llega a la cabecera del mismo, situada en el norte de la provincia de Almería.

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El nacimiento almeriense del Guadalquivir, Se encuentra en el municipio de Vélez-Blanco, provincia de Almería.

4º Discusión sobre el nacimiento del Guadalquivir
Si bien en la actualidad se considera que es el Guadiana Menor el que vierte sus aguas al Guadalquivir, algunos estudios recientes señalan que realmente es el Guadiana Menor el río que mantiene su cauce y que el río que nace en la Sierra de Cazorla es un afluente de aquel. El Guadiana Menor debería ser el auténtico río Guadalquivir, ya que en la confluencia Guadiana Menor-Guadalquivir el primero tiene más longitud y por ende más jerarquía que el segundo, por lo que debería haber conservado su nombre. Remontando el curso del Guadiana Menor, auténtico Guadalquivir desde el punto de vista puramente geográfico, se llega a la cabecera del mismo, situada en el norte de la provincia de Almería.

5º El nacimiento almeriense del Guadalquivir.
Se encuentra en el municipio de Vélez-Blanco, provincia de Almería, España. Desde la pedanía de Topares parte un camino sin asfaltar hacia el Caserío de Santonge, paraje protegido que alberga notables pinturas rupestres. A una distancia de unos tres kilómetros de Topares, y a unos cien metros de este camino, se encuentra el brocal de un pozo. Esas aguas, que en época de lluvia brotan a pocos pasos del pozo, ya pertenecen a la Cuenca Hidrográfica del Guadalquivir; es la surgencia que aporta aguas al Guadalquivir más lejana a su desembocadura en Sanlúcar de Barrameda, Cádiz. Este cauce, frecuentemente seco en la superficie, oculta una corriente subterránea que aflora con un modesto caudal cerca de La Cañada de Cañepla (municipio de María, también en la provincia de Almería), donde recibe el nombre de Arroyo de La Cañada del Salar. Es testigo de este cauce subterráneo la vegetación propia de zonas húmedas que crece sobre él; entre esta vegetación destacan las abundantes juncáceas. La riqueza natural del territorio queda reflejada en varios espacios protegidos. Un Parque Nacional, el de Sierra Nevada, compartido con la provincia granadina, en el que se pueden encontrar cabras monteses y jabalís. Dos parques naturales: el P.N. de Cabo de Gata, declarado en 1987 y primer parque natural marítimo-terrestre del país, es probablemente uno de los últimos reductos de costa virgen del Mediterráneo. Cuenta con multitud de especies vegetales xerófitas endémicas y hasta hace pocos años fue santuario de las últimas focas monje de Europa. Por otro lado, el P.N. de la Sierra de María-Los Vélez ostenta grandes extensiones de encinar mediterráneo y poblaciones de la escasa tortuga mora. Además existen cuatro Parajes Naturales: Desierto de Tabernas, Karst de Yesos de Sorbas, Punta Entinas-Sabinar y Sierra Alhamilla; así como dos Reservas Naturales: Albufera de Adra y Punta Entinas-Sabinar. Próximamente serán declarados Paraje Natural marítimo-terrestre la isla de Alborán y su entorno. De entre ellos los más importantes sean quizá los dos primeros parajes naturales: el Karst de Yesos de Sorbas es un complejo de cuevas, cañones y demás fenómenos kársticos excavadas por el río Aguas en un depósito de yeso cercano a la localidad de Sorbas. Del Desierto de Tabernas hablamos en el siguiente apartado. Otras dos joyas naturales de la provincia son el olivo gigante de Agua Amarga, probablemente el más grande y uno de los más longevos del continente europeo; y la geoda en yeso de Pulpí, entre las de mayor tamaño del planeta.

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6º Clima
El clima de Almería es subdesértico, mediterráneo, cálido y seco. Su característica más destacable es su cielo despejado y luminoso, los veranos cálidos y los inviernos templados. En la costa sur, es característico el fuerte viento de poniente. Por su parte, el levante es famoso en la capital ya que suele hacer subir la temperatura varios grados.

También la pluviometría es escasa, siendo el Cabo de Gata el lugar donde menos llueve de España. Asimismo, el Desierto de Tabernas es, técnicamente, el único desierto del continente europeo, lo que le confiere características naturales únicas que le valieron convertirse en escenario del rodaje de multitud de películas Western durante los años 60, 70 y 80.