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Os dejo un video del programa Password de Cuatro, un concurso que consiste en adivinar una palabra respecto a otra palabra que tu compañero te dice:
YouTube - Abril cerral (Alta calidad)
Vaya tela con la cultura de la juventud española, y encima la hija de la Lolita riéndose en tó la cara de la niña...
Esperaos que aquí hay uno mejor de un jovenzuelo en El Diario de Patricia de Antena3, ya me contareis que hacer con salvajes así:
YouTube - joven agresivo en el diario de patricia
La parte con Miki Nadal y Patricia Conde es de Sé Lo Que Hicisteis... de laSexta.
Podemos tomarlo a chirigota, por ejemplo preguntarnos acerca del cociente intelectual de la muchachita, o podemos usarlo como un ejemplo más de la barbarie que se ha apoderado de los españoles en las últimas décadas. Y es que está demostrándose que cuanto mayor es el grado de escolarización, mayor es el nivel de estulticia.
De ahí podemos concluir que, realmente, el cociente promedio de un buen sector de la población española da para muy poquito y lo que hace el sistema educativo es ponerlo de manifiesto. Así, antes, cuando un individuo decía una burrada, se le atribuía a su ignorancia; ahora, a su deficiencia.
Cita:
Iniciado por CruzadoNacional
Bueno, no está tan mal ¿no? :tonto2: porque ¿qué se puede esperar de semejante programa y de otros similares? Recuerdo una noche en la que me había quedado frito delante del televisor. Por fin acabé por abrir un ojo ¿y qué me encuentro en la pantalla? Pues un concurso, ¡ojo! un concurso, en el que una "tipa" respondía a las preguntas de una "presentadora impresentable" (si la hubiera llevado a mi casa, mis padres me hubiesen exigido respeto) afirmando que se había acostado con no sé cuántos tíos y lo decía tan pancha delante del "tipejo" que era su marido :toyenfermo::confused:. El fulano en cuestión ponía "caritas", pero ¡no pasaba nada!, y es que ella seguía acumulando "pasta gansa" en una iluminada pizarra de colorines.
O sea, nada nuevo bajo el sol, lo cotidiano,:ehhh: lo corriente y moliente, :no2: lo de cada día :nope:. Si aquí, en este país, los raros, los alienígenas, somos nosotros. :umm:
No toda la juventud somos asi, una gran parte si lo son pero no todos.
El problema esta en que los que son asi pasan por encima de los que no porque es lo que "se lleva" y los demas a callar sino nos "comen".
Muchas veces se le atribuye la culpa a la educacion que se imparte en casa, pero no siempre son los padres los culpables, un ejemplo es mi casa en la cual yo no me comporto de esas maneras pero mi hermano es una mala bestia.
Gran parte de la culpa es de lo que se vive en la calle donde todo esta lleno de gallitos que andan pavoneandose de no se que. Pero lo mejor esta en colegios e institutos donde la violencia esta a la orden del día.
El sistema educativo premia a la ignorancia e incultura, ese es el gran problema.
Con Dios.
Espero que no te hayas molestado con lo de la juventud, yo también soy joven y también soy aún una víctima de la LOGSE.Cita:
Iniciado por MonicaÑ
No, no me molesto porque es la realidad generalizando la juventud de hoy en dia no vale nada, como todo hay excepciones.
Con Dios.
Por supuesto que no toda la juventud es expresión de barbarie. ¡Gracias a Dios! si no estaríamos apañados para "el hoy" y para "el mañana". Estos son casos puntuales que los medios de comunicación destacan por su incapacidad social. Y que no dejan de ser un espectáculo indigno, pues se rebaja la condición de esos chicos, los cuales no dejan de ser personas.Cita:
Iniciado por MonicaÑ
La educación empieza en casa, desde el mismo momento en el que el bebé está en el mundo. Si lo acostumbras a "brazos" se pondrá a llorar en el momento en que lo deposites en la cuna, aunque necesite del calor materno, de sentirse seguro y protegido, las dosis de mami y papi han de estar calculadas. Pero bueno, esto es sólo un ejemplo con el que pretendo justificar por qué la educación empieza en casa.
Cuando llega la hora de ir al cole, esa personita encantadora ya debe de estar socializada en casa para, así, ampliar adecuadamente su universo personal y poder convivir con el resto. Por supuesto, no tardarán en surgir rivalidades, amistades y hasta enemistades. Pero si la educación recibida hasta ese instante ha sido la adecuada, los aspectos conflictivos estarán más atenuados y mejor encauzados.
Naturalmente deberemos contar con la personalidad y carácter de cada individuo. Algunos rasgos serán hereditarios, pero otros son adquiridos. La experiencia a medida que el personaje va creciendo cada vez es más larga en todos los sentidos. Los pre-juicios tanto positivos como negativos, formarán parte de sus apreciaciones y opiniones. En casa seguirá la labor educativa, mientras en el colegio o instituto la formativa y socializadora.
Por supuesto, llegada la edad de la adolescencia se dispararán todas las alarmas. Toda la carga experiencial acumulada durante los años de la infancia va a aflorar, todas las ilusiones y las frustraciones se van a revelar. Los problemas que afectan al adolescente no van a ser fácilmente entendidos y es que ni son niños ni son adultos. Entonces, si el centro escolar es un reflejo de la sociedad, y ésta es una sociedad desestructurada, que ha renunciado a los valores, que relativiza las normas, que aplaude la anormalidad, que justifica cualquier barbaridad y que persigue lo que justifica la existencia de la propia sociedad, entonces la casa ya no puede cumplir su papel, y el centro escolar se transforma en una jaula del circo romano.
El adolescente será pasto de toda clase de vaivenes, se volverá rebelde e irascible en cuanto se le pongan cotos a sus caprichos, buscará la compañía de los amigos que se encuentran en la misma situación que él, y se convertirá en la pesadilla de sus padres y resto de la familia. ¿Cómo se puede combatir esto? Yo sólo conozco dos maneras: una doméstica, en casa, intentando acercarse a ese niño grande en que se ha convertido el adolescente y dejando al tiempo que actúe con su bálsamo de todos los ímpetus incontrolados; la otra forma es cambiando la sociedad, la cuestión es ¿y cómo se cambia una sociedad? A este respecto se me ocurren otras dos formas: o por el devenir de las generaciones, o por sucesos dramáticos o incluso trágicos.
A lo que yo me referia con la educacion en casa es que por ejemplo yo he recibido la misma educacion que mi hermano y somos polos opuestos no me refiero a personalidad (que eso tambien) sino a comportamiento dentro y fuera de casa.
La experiencia adquirida durante la infancia y pubertad es lo que realmente se ve sobre todo en la adolescencia, y es en la adolescencia cuando queda marcado tu caracter y formas de actuar, luego es dificil cambiar.
La educacion en casa es la que es pero sino cambia la sociedad no se puede hacer nada.
Y es muy facil hecharle la culpa a la sociedad pero nosotros hacemos lo que vemos, si vemos una sociedad sin cultura, ni educacion, ni disciplina, ni humildad, ni respeto a la vida, etc se vera relflejado en nuestro comportamiento y en la sociedad de mañana.
Con Dios.
Lo que tenemos encima es relativamente fácil de resumir. La muestra la encontramos en esa especie de lobotomía frontal sociológica que es Educación para la Ciudadanía. Por una parte el Estado se mete en casa (sexualidad, creencias...etc); por otra lava el cerebro asegurándose un igualitarismo en las ideas (ideas que no son, sino creencias de metafísica parda izquierdosa de usar y tirar), que asegure la implantación completa de lo políticamente correcto. Si se quiere educar al ciudadano en el pensamiento, hay que enseñar pensamiento y hay que enseñar a racionalizar dicho pensamiento. Y para enseñar pensamiento hay que enseñar Historia del mismo e Historia política, económica, social... Y para todo ello hay que enseñar a pensar y para ello está la Filosofía.
Pero, además, lo que se busca es des-moralizar la misma sociedad a la que afirman querer socializar en valores, ¡mentira! Una sociedad será moral si está educada en el temor y respeto de Dios y de esas condiciones "sine qua non" deviene la ética y todo lo que vaya en contra de estas premisas es falso de raíz, y sus consecuencias son, precisamente, las que estamos tratando en este hilo.
¿Y qué se puede hacer? ¡rebelarse! Hay generaciones a las que les toca combatir en guerras y revoluciones; hay generaciones a las que les toca vivir tiempos sosegados; hay generaciones a las que les toca la lucha ideológica, el combate incruento pero no menos cruel, no menos devastador, que el de las trincheras, y esa es la nuestra, esa lucha es la que nos ha tocado a nosotros.