Para el alma y para la mente, reconozco que los acontecimientos me desbordan, y es que el desorden se ha desatado en el mundo en un proceso imparable, cada vez más rápido y cada vez más virulento. Da igual lo que leas, es indiferente sí las noticias son del conflicto en Ucrania, como lo que sucede, o sale del Vaticano que es mucho peor, en la Iglesia Católica. Es inusitado que todo el mundo tenga que ser maricón por decreto, y si no lo eres ¡a callar! aunque "ellos, ellas, elles" sean una minoría, lo dice la jefa de "la banda del c...", o lo dice el chocheante que habita en la Avda de Pensilvania de Washington. La cosa es que todo el mundo "hala, trágala". El Supremo de Estados Unidos ha derogado una aberración jurídica, que era de ley el hacerlo ya que la sentencia que la sustentaba ha asesinado a cientos de miles de inocentes y ya van doce o catorce estados de aquélla Unión del otro lado del océano que se han apresurado a derogar el genocidio del aborto, menos mal que lo han podido hacer. Y claro, ya han saltado todas las alarmas, y las histerias de toda laya, entre los asesinos de niños diminutos inocentes, de niños a los que se priva de ser un genio o un delincuente, porque según el criterio de estos descerebrados desalmados, se están tirando años de lucha en pro de los "derechos" de las mujeres. Derecho a quitarse las bragas sin mirar las consecuencias de ello. Pero el argumento es otro, el "derecho" a no mantener en gestación al producto de violaciones, pues entonces es que los Estados Unidos son un país de violadores. Y así debe de ser, porque no hay soberanía ajena que no violen, que no se la pasen por el forro de la entrepierna, y con el aplauso de los violados. Ahí tenemos al presidente del planeta dictando una orden para el mundo entero, ojo, a todo el Orbe, por la cual hay que fulminar toda terapia orientada a restituir la natural tendencia sexual de hombres y mujeres que, por la razón que sea, se dedicaron a otros menesteres en el pulguero. Y el firmante mandante -y mangante-, afirma que esas terapias son una crueldad ¿y eso cómo lo sabe él? Y para mayor recochineo, y aunque no son obligatorias para nadie, sino bien voluntarias, resulta que el que es maricón hoy, y quiere dejar a trás esa etapa de su vida, no tiene derecho a ello porque una banda de viejos chochos babeantes le niegan esa decisión de libre albedrío personal. Pero debe de ser porque en los EEUU hay un dicho popular, al menos así me lo han contado, que afirma "En ... no hay más que maricones y vacas. Como tú no eres toro sólo queda la otra opción" , y póngase el nombre del estado que se quiera.
El mundo está hecho un asco, huele a guano por las cuatro esquinas. A diario desayuno leyendo la Prensa del día, y no necesito churros para alimentarme en cada jornada, pero sí una pastilla para la acidez estomacal, además de una servilleta enorme para los atragantamientos casi cotidianos. Y es que he llegado a la conclusión de que la mayor parte de la gente es imbécil hasta cuando duerme, sino es imposible entender qué está pasando y porqué se permite. Intento imaginar cómo serían las reacciones populares en distintos países hace cien o doscientos años, no hace falta ir más lejos, sí los acontecimientos actuales se hubiesen producido entonces. Tengo la convicción de que habría corrido mucha sangre, pero hoy no. Hoy todo se resuelve dialogando: "cuenta lo que quieras, que yo te impongo lo que has de pensar y hacer y además me aplaudes, porque yo lo sé todo y como tú eres tonto de capirote me tienes que estar agradecido" Y el afrentado, aunque no lo sabe o no se da cuenta, responde con un sonoro "sí, bwana" Y lo vemos en casa, o lo que queda de ella, pongamos lo de Andalucía. Después de una tiranía de cuarenta años de choriceo, con un compás de espera ante la duda porque la gente es lenta en eso de pensar, eligen a un gobierno pepero para otros cuarenta años más, y están felices. No han entendido aún, que "tanto monta, monta tanto, el PSOE como el PP". Y siguiendo con la clave doméstica, ahora los etarras son los que van a juzgar a los tribunales "franquistas", o sea, el despiporre absoluto, la demencia total, Kafka convertido en escritor costumbrista, y así..., ¿cómo la llaman? ¡ah, ya! un tal Antonio, "okupa" del palacio de occidente mirando a la Sierra, puede seguir en el machito y acudir al aquelarre otanista -y onanista también-, que se está celebrando por los madriles. Ya tiene Antonio fotos para poner en el álbum y enseñarselas a los nietecitos de lo importante que era cuando vendía y traicionaba a España un día y otro también y al siguiente otra vez y más adelante en la semana próxima más todavía. Tenemos en perspectiva no sólo un otoño caliente, tal como se suele decir en la Prensa pesebrera, sino inquietante y lleno de incertidumbres, con una amenaza de que el litro de combustible llegue a los 3 euros, con un IPC que ya ha superado el 10% y puede llegar en breve al once por ciento, y aquí todo el mundo pensando en las vacaciones, la playa, el chiringuito, la disco, el pictolin para eludir los resultados de los controles de alcoholemia y drogas, eso creen las mentes simples, y no pasa nada. No pasa mintras Antonio se hace fotos en el aquelarre madrileño y amenaza a Putin, porque con las medidas que está tomando se va a hacer con el control absoluto de todos los resortes del poder a efectos de perpetuarse para siempre en la poltrona. Y por el Valle de los Caídos no hay que preocuparse, porque cuando le llegue la hora él descansará alli, aunque eso sí, para entonces habrán quitado la Cruz porque eso le molesta -¿por qué será, tal vez es que tiene conciencia?-, y también se llamará de otro modo, "El Valle de los Héroes de la Democracia", por ejemplo.
Por todo eso y mucho más, muchísimo y por que también hay vida aunque poca nos dejan, es por lo que últimamente callo mucho y es que prefiero dedicarme a mis plantitas y a los pececitos de mi acuario, ¡ah! y a eso que los menesterosos mentales llaman literatura de evasión, como sí fuese un género menor y que "ellos, ellas, elles", por supuesto, son totalmente incapaces de escribir.
