De coches eléctricos

Siempre he manifestado mi excepticismo sobre la viabilidad real y efectiva del sistema de propulsión eléctrica para automoción a corto y medio plazo por diversas razones de tipo técnico, principalmente la inexistencia de baterias con rendimiendo y coste adecuados,(sin entrar en otras fuentes de alimentación como pilas de combustible, hidrógeno, etc.todavía escasamente desarrolladas para esta aplicación.
En cuanto a razones de post-venta, no menos importantes en la práctica, dada la inexistencia de una red especializada capaz de proporcionar asistencia a los previsibles miles de usuarios que en su día (bastante lejano) lo necesiten; entre estas necesidades imprescindibles a implementar, estaría toda una red de carga de baterias asequible y eficaz.
Los vehículos híbridos, es decir aquellos que están equipados con dos motores, uno electrico y el otro convencional de combustión, reflejan, en definitiva la incapacidad de la solución del motor eléctrico como único propulsor de los coches.
.Sin embargo este tema de los coches eléctricos resulta muy del agrado de ecologistas y demas ilusos y arbitristas que pululan por los medios de comunicación y cuya influencia se deja sentir en las actitudes de algunos políticos, y no solamente españoles, que adoptan esta bandera del coche eléctrico como una más para incluir, por ejemplo, en ese programa de ilusiones sin verdadero sentido económico que constituye “la economía sostenible” zapateril y de su ministro de industria el demagogo Sebastián.

Me complace citar aquí la muy autorizada opinón, coincidente con todo lo arriba escrito, de Lorenzo Ramaciotti, ingeniero y responsable de diseño de todas las marcas del grupo Fiat, a excepción de Ferrari, el cual cree que todo el planteamiento del coche eléctrico es un poco falso. Así lo afirma en una entrevista concedida al diario La Razón: "Creo que aún este tipo de energía tiene que resolver algunos problemas muy importantes, como la autonomía, la red de distribución con enchufes para coches y el tiempo de recarga".
Ramaciotti, por el que cada día pasan todos los nuevos coches de Fiat, Lancia, Chrysler, Maserati, Alfa Romeo y Abarth, ha sido el padre de varios de los Ferrari de últimas generaciones, como el 550 Maranello, el 360 Modena, el Enzo o los más actuales F-430 y 612 Scaglietti, piensa que es "evidente que hay que trabajar mucho aún para que el coche eléctrico sea tan efectivo como el de combustible. Creo sinceramente que al motor de combustión le queda aún un muy largo recorrido".

Es una cosa que caerá por su propio peso, tampoco había necesidad de cambiar la iluminación usando aceite de ballena hasta que compensó más la inversión en el mercado del queroseno. Se cambiará cuando se necesite o cuando compense, no antes.

Pero la idea en si no es mala, y viable es. Lo que no tengo claro es si es más ecológico si para cargar los coches hay que instalar más centrales de carbón...

Viable, hoy por hoy, no lo es, si entendemos por viable disponer de un vehículo eléctrico con unas prestaciones similares a las que estamos acostumbrados los que disponemos de coches utilitarios; el problema fundamental es que no existen BATERIAS ni sistemas de propulsión que cumplan los requisitos indispensables para que pueda ser viable un coche eléctrico; ése es el problema, por tanto, todos los prototipos que aparecen con gran alarde publicitario son solo eso, prototipos, sin valor práctico como para popularizarse en el mercado.