Es una explicación en exceso retorcida sobre la relación entre la Iglesia y los judíos, y sobre hechos históricos y judíos. Hay una base real de lo que dices, pero le estás dando demasiadas vueltas a la tuerca.

El problema de eso es que al final uno no se queda contento con ninguna explicación sobre nada hasta que no logra poner un judío en el centro de la foto, y ahí es donde ya no estamos hablando de búsqueda de los hechos sino de otra cosa. Véase este tema y la necesidad de convertir a Francisco en judío por esa obligación auto-impuesta de tener esa pieza, sería un ejemplo.