CDLV aniversario de Su Majestad Católica Don Carlos I.

«¡La sangre de los Reyes no muere, rapaza! / No hay nadie que fije término a un reinado, / el buen Rey gobierna aun siendo enterrado; / y en vano la muerte pasa su cuchilla, / ¡pudriendo en la huesa se manda en Castilla!»
(Ramón del Valle Inclán, «Voces de Gesta», jornada primera).

Tal día como hoy de 1558 moría en el Monasterio de Yuste SMC el Rey de la Españas y de las Indias fundador del Reyno del Perú Don Carlos I QEPD; “Don Carlos I de Castilla y de Aragón”, “Carlos IV de Navarra”; en el “Sacro Imperio Romano Emperador Carlos V”. Tras abdicar en su hijo, Felipe II, el monarca se había retirado a aquel monasterio para preparar su muerte.

Archivo adjunto 6288 Asistido en la postrera hora por su hermana SAR Doña María de Hungría y su hija Doña Juana, recibió los últimos sacramentos del Arzobispo de Toledo Don Fray Bartolomé de Carranza. Según Luis Quijada, sus últimas palabras fueron: «Yo veo que me voy acabando muy poco a poco: de que doy muchas gracias a Dios, que es Su voluntad. Diréis al Rey mi hijo que yo le pido que tenga en cuenta con estos criados generalmente, los que aquí me han servido hasta la muerte, y que se sirva de Gila el barbero en lo que le pareciere y que mande que en esta casa no deje entrar huéspedes».

Don Carlos I continuó la conquista y evangelización del Nuevo Continente, combatió al francés y al turco y luchó contra la herejía en defensa de la Fe católica. Para el poeta Hernando de Acuña, «un monarca, un imperio y una espada». Ante la naciente Europa, su antítesis, la Cristiandad se desmoronaba: la Monarquía Hispánica la sostuvo y la prolongó, dándole nuevos cristianos y nuevos territorios por los que perdía, y conteniendo a los herejes. Sin la traición de la monarquía parisina, la herejía habría sido barrida del Viejo Continente.

Saludos en Xto Rex et Maria Regina
Pro Deo Patria et Rex
No se ama lo que no se conoce.