De nuevo, ¿que pinta aquí eso de "Gora Iruñea!" (sabinianismo de laboratorio eso de Iruña o Iruñea, con ese odio feroz a cualquier vestigio de Roma sobre Navarra -Pamplona viene de Pompeio, que fue quien fundó la ciudad sobre el pequeño asentamiento de Bengoda- o Vascongadas)? Esa plataforma se retrata por si sola, situada en el Bar Jarauta, en la calle homónima, madriguera de toda la escoria etarra. De nuevo el pobre Padre Jarauta, sacerdote aragonés y carlista, y después guerrillero en la Nueva España contra los gringos.

Los imbéciles estos quieren unos Sanfermines sin toros, sin procesiones religiosas, sin banderas de España y de Navarra. Pues la llevan clara, este año otra vez volveremos a llevar, en su misma calle, las banderas de siempre.