Tiene gracia eso de "la libertad religiosa". Será la que disfrutan los cristianos en países como Arabia Saudí.
No sé qué es peor, la desvergüenza de este liderazgo Islámico Mundial o la estupidez de la progresía que los considera ejemplo de civilización y paradigma de libertad.
Y sobre la nacionalidad a los "descendientes de los andalusíes", pues que no se preocupen, hombre, que aquí damos permiso de residencia y certificados de nacionalidad a cualquiera que venga, no importa en qué condiciones ni con qué motivos. Y de paso que pidan alguna subvención/indenmización que el tonto progre de turno se la concederá.
Si es que los occidentales somos muy muy malos, depravados si es que
además somos cristianos, y todos los demás unos santos supermegaguays.