La historia tiene la costumbre, manía o mala fé, de repetirse. Siempre ha habido generaciones perdidas que han sido sustituidas por otras que han significado lo contrario, para comprobarlo basta con leer tratados de Historia enjundiosos, no los panfletos de la secundaria y otras soflamas impresas políticamente correctas.
A mí el "furbo" no es algo que me entusiasme, pero si ha de servir de alambique para que a la gente joven le empiece a hervir la sangre por la idea de España, ¡bienvenido sea!, me haré aficionado, más aún, hincha. Espero que en los JJOO los atletas españoles se inflen a medallas, espero y deseo que el nuevo seleccionador nacional de fútbol, Vicente del Bosque, lleve a la selección a ganar el mundial dentro de 2 años.
Por algo se empieza, este puede ser un camino como cualquier otro, después vendrán otros intereses, otras vías abiertas, una nueva generación de españoles, sean de donde sean, que sientan Las Españas como propias, y la pesadilla habrá terminado.
A mi lo que me avergüenza y me indigna hasta el borde del soponcio, es ver, escuchar y soportar, a estas hordas de descerebrados antiespañoles, mientras que en Inglaterra había jóvenes ingleses celebrando como propio el triunfo de España. Hasta eso hemos llegado y ya es hora de empezar a cambiarlo, con lo que se pueda, poco a poco, pero un poco más cada día, aquí, en nuestras casas, en el trabajo, en las aulas, en el gimnasio, en la tasca o en el club de golf, da igual, en todas partes y siempre dando, dando , dando... aunque se tarde. Esta chusma ocupa el Poder, esta chusma es la que campea, pues es a esta chusma a la que le toca empezar a recibir.
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