
Iniciado por
Martin Ant
Decía Balmes que los partidos «de instinto moderado y sistema conservador» se convertían a la postre en conservadores «de los intereses creados de una revolución consumada y reconocida»; y que, a la postre, resultaban más útiles a la Revolución que los propios partidos revolucionarios.
Así ocurre en la cuestión del aborto, donde vemos cómo el partido conservador se convierte, mientras gobierna, en conservador de los «avances» del partido socialista, para que luego el partido socialista pueda seguir «avanzando» tan ricamente, en la seguridad de que el partido conservador conservará las cosas en el exacto punto en el que él las dejó. Ocurrió durante los dos mandatos de Aznar, en los que se «conservó» fielmente la legislación despenalizadora del aborto impulsada por González, para que luego Zapatero pudiera seguir «avanzando»; y vuelve a ocurrir ahora, pese a todos los jeribeques y pamemas que el nuevo gobierno conservador ha probado ante la galería. Año y medio después de que accediera al poder con mayoría absoluta, la legislación sobre el aborto sigue siendo la que Zapatero dejó.
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