Vine a parar aquí porque he leído un interesante libro, LOS GODOS, de Jurate Statkute de Rosales, en el que la autora afirma que los godos eran de origen báltico. Si bien su exposición suena coherente, me cuesta deshacerme de la vieja idea según la cual eran germanos. Así aterricé en este sitio. ¿Con qué frecuencia estaré en él? No sé, porque soy bastante curioso y suelo meterme en muchos lugares de Internet; pero como lo poco que vi hasta ahora me gustó, con seguridad pasaré más tiempo aquí que en cualquier página dedicada a los chismes del espectáculo o las profecías de Nostradamus. En fin... Esto es todo por ahora.