Barbaridades como esas y los individuos responsables tendrían que estar condenados y perseguidos dentro de la Iglesia... ¿No se podría emitir una denuncia que llegara a mayores esferas de la jerarquía eclesiástica para evitar que ocurran vergonzosos sucesos como este, de nuevo?
Habría que recordarde al señor que ha motivado este hecho indignante que, independientemente de su sesgada ideología política, la Santa Iglesia es Católica y por ende universal con lo a diferencia de ciertas herejías se extiende por todo el Orbe y a todos los hombres.