Yo creo que esto merece una aclaración.

El hecho de homenajear a Ramiro Ledesma, y la fundación de Falange, es parte de nuestra historia. Al menos yo, no siento ningún complejo por los Falangistas, ni los Franquistas, ni los Carlistas.

Más verguenza me dan las hordas de la internacional, los ateistas, el rojerio ilustrado.. Aunque por ello, parezcamos unos bichos raros, o dementes.

En mi casa había un Franquista, mi padre y una Católica devota practicante: mi abuela querida. No siento ninguna vergüenza por ello, ni modo. Personas integras, nobles muy trabajadoras y tan imperfectas como cualquiera.

Este, es un país de acomplejados.