La cuenta atrás para el cincuentenario
La cuenta atrás para el cincuentenario
Hoy ha comenzado la cuenta atrás para la efemérides del L aniversario de la apertura del Concilio Vaticano II. No sé cómo un padre conciliar de aquellos que arribaron a Roma llenos de entusiasmos y expectativas habría imaginado la situación de la Iglesia Católica medio siglo después del acontecimiento. Pero estoy convencido de que nunca jamás se hubieran figurado el presente que vive y sufre la Iglesia, tan lejos del entusiasmo aquel, hoy con todas aquellas expectativas malogradas, descarriladas, desviadas, degeneradas, frustradas; todo eso que ha hecho que, finalmente, aquellos que fueron descalificados cuando fueron llamados 'profetas de desgracias' sean hoy re-considerados como los perspicaces que vieron venir el futuro que hoy es nuestro presente. Nuestro desalentado, roto y languideciente presente.
Pero tenemos Asís 3, a la vuelta de la esquina, este mismo Octubre. Y nos damos abrazos fraternales con protestantes y evangelistas, nuestros invitados habituales. Y confraternizamos con nuestros 'hermanos mayores' judíos (a pesar de sus muchas, constantes y declaradas reticencias). Y vamos del brazo con los mahometanos. Y nos sentimos a gusto con el Dalai Lama, los gurús hindúes, los shintoístas del Japón y los animistas aborígenes de Australia. Nos hemos visto y nos llegamos a considerar uno entre iguales, con ese entusiasmo iluso que quedó flotando en la atmósfera católica como un 'smog' (y no de incienso, precisamente) que nos contamina el aire que respiramos, un enrarecido aire católico que ya no sabemos cuánto porcentaje de catolicismo puro contiene y cuánto des-catolicismo no-católico aspiramos al inspirar.
Si el Concilio cincuentón fue - decían algunos - abrir ventanas, es ahora más que nunca cuando hay que abrir ventanas, puertas y vanos para recuperar oxígeno católico y depurar el no-catolicismo del des-catolicismo ambiental-atmosférico que nos contamina.
El Concilio abrió - yo diría - el agujero en la capa de ozono-católico; permítome esta otra comparación, muy ecologista, al alcance comprensivo de nuestros filo-ecologistas, que son muchos.
A estas alturas, huyo de los entusiasmados conciliaristas vaticanosecundistas como de los apestados. ¿Ustedes no? Pues mírense, no sea que estén ustedes incubando algún virus descatólico. Esta misma tarde comentaba con una amiga, doctora en medicina, aquello que decía el Papa Benedicto, que nuestra sociedad, este mundo post-moderno del Tercer Milenio adveniente (¿recuerdan Uds?) ineunte (¿se acuerdan Uds?) parece, dice el Papa, como si hubiera criado 'anticuerpos' contra el Cristianismo. La cuestión inquietante es dilucidar cuántos de estos 'anticuerpos han sido efecto de una auto-inoculación; o aclarar cuántos de estos agentes anti-católicos que pululan por ahí se han gestado (se han diseñado?) dentro de la misma Iglesia Católica. Postconcilar, claro.
No se reconoce, no lo van a reconocer, pero por todo esto, por el balance negativo de estos 50 años, se postula la Nueva Evangelización. El otro día se lo escuché a un prelado, en una plática: "...porque no somos los curas del nacional-catolicismo, no somos los curas post-conciliares del 'espíritu del vaticanosegundo': Somos, hoy, los sacerdotes para la 'Nueva Evangelización'..."
Y a mí me sonaba la plática a fórmula ad casum, a repetitorio para el momento, a instrumentum laboris de papel, discurso magisterial con vacio de indefinición material y también formal, entusiastamente ambiguo, optimistamente juanpablista.
Cincuenta años sobre cimientos conciliares de aquellos han demostrado no valer para sostener el edificio de la Iglesia, con problemas tectónicos muy graves.
Pero habrá celebraciones, se celebrará lo que pasó, con más documentos, con remembranzas y reposición de semblanzas. Del 2012 al 2015 (11 de Octubre-8 de Diciembre) se disparará una estupenda y festiva piroctenia. No sé cómo llamarla, dadas las circunstancias, si castillo de fuegos artificiales o de fuegos fatuos.
Lo mejor del Vaticano 2º es que ya se abrió, se celebró y se clausuró, gracias a Dios. Seria terrible ser católico consciente en el siglo XXI (Tertio Millenio (adveniente-ineunte)) con la aprensión de un concilio ecuménico posible, que se le pudiera ocurrir a alguien, o que alguien estuviera dispuesto a convocar. Sería terrible.
Pero cuando uno es conscientemente católico de la deriva de estos cincuenta años, algunas veces me pregunto cómo hubiera podido ser una Iglesia sin Vaticano 2º. Incógnita de neta historia-ficción, lo reconozco. Pero también confieso que estoy convencido de que sin Vaticano 2º las cosas que hoy sufre la Iglesia no hubieran sido tales (o no serían de la misma manera).
Total, cincuenta años de bajón con muchos entusiasmos y vanos optimismos en medio de la decrepitud.
Lo mejor de los fastos del cincuentenario va a ser que estas cosas que estoy diciendo se dicen cada vez más, que cada vez somos más los conscientes que nos identificamos con el niño del cuento que señaló y gritó la verdad entre la multitud fascinada: ¡¡El rey va desnudo!!
Si me explico.
+T.
EX ORBE
Re: La cuenta atrás para el cincuentenario
El futuro Juan Pablo III no hará el Vaticano III (la coincidencia del numeral quedaría un poco risible). Pero nada se lo impedirá a Juan Pablo IV. Hay muchos temas en la agenda (sacerdocio de mujeres, supresión del celibato, homosexualismo) y se querrá aflojar la presión anticatólica del mundialismo contra estos últimos pontificados "reaccionarios" de JP II y de Benedicto y volver al sano progresismo de Pablo VI y Juan XXIII y a recuperar la "Iglesia de siempre", con la "entrada de aire fresco".
A fin de siglo, un Juan Pablo VI o VII convocará el Vaticano IV para reformas inverosímiles que ahora se nos antojan inimaginables, pero no para los (nominalmente) católicos de entonces.
Re: La cuenta atrás para el cincuentenario
Dios no puede permitir que la cosa llegue a ese extremo. Espero que intervenga primero y venga antes la Parusía.
Re: La cuenta atrás para el cincuentenario
Cita:
Iniciado por
ALACRAN
El futuro Juan Pablo III no hará el Vaticano III (la coincidencia del numeral quedaría un poco risible). Pero nada se lo impedirá a Juan Pablo IV. Hay muchos temas en la agenda (sacerdocio de mujeres, supresión del celibato, homosexualismo) y se querrá aflojar la presión anticatólica del mundialismo contra estos últimos pontificados "reaccionarios" de JP II y de Benedicto y volver al sano progresismo de Pablo VI y Juan XXIII y a recuperar la "Iglesia de siempre", con la "entrada de aire fresco".
A fin de siglo, un Juan Pablo VI o VII convocará el Vaticano IV para reformas inverosímiles que ahora se nos antojan inimaginables, pero no para los (nominalmente) católicos de entonces.
No seas tan pesimista hombre. Yo creo que Rusia se convertirá, invadirá las decadentes democracias occidentales e impulsará una nueva edad de oro de la Tradición en la que el concilio hippie será olvidado como una mala resaca de los 60.
El progresismo es una cosa que vive de rentas del pasado, no puede vivir por si sola indefinidamente. Dios tiene capacidad de cambiar todo de la noche a la mañana de la forma más insospechada.
Re: La cuenta atrás para el cincuentenario
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Iniciado por
Donoso
No seas tan pesimista hombre. Yo creo que Rusia se convertirá, invadirá las decadentes democracias occidentales e impulsará una nueva edad de oro de la Tradición en la que el concilio hippie será olvidado como una mala resaca de los 60.
El progresismo es una cosa que vive de rentas del pasado, no puede vivir por si sola indefinidamente. Dios tiene capacidad de cambiar todo de la noche a la mañana de la forma más insospechada.
Estoy de acuerdo; tal venga un Concilio en Moscú, pero también cabe la posibilidad de que la Tradición triunfe en Hispanoamérica y se haga por ejemplo, un Concilio en Montevideo...Cuando menos nos esperemos, de donde menos nos esperemos, surgirá una gran contrarrevolución.
Re: La cuenta atrás para el cincuentenario
Evidentemente, Dios no puede perder la guerra aunque su bando pierda algunas batallas. Una de dos: o se produce una gran reacción que cambie las cosas, o viene la Parusía.
Re: La cuenta atrás para el cincuentenario
Concuerdo con Donoso. En primer lugar porque del estado putrefacto del ex ociidente cristiano nada se puede esperar ni menos del clero hereje que se desvive por destruir la Fe; y, en segundo lugar porque tenemos la certeza de Nuestro Señor de que las puertas del infierno (y aquí se incluye el concilio y los conciliaristas) no prevalecerán contra nuestra Santa Iglesia.
EXURGE DOMINE ET JUDICA CAUSAM TUAM
Re: La cuenta atrás para el cincuentenario
Por lo que se ve, lo que esta ocurriendo, y lo que viene, estamos en tiempos Parusíacos.
Re: La cuenta atrás para el cincuentenario
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Iniciado por
Hyeronimus
Evidentemente, Dios no puede perder la guerra aunque su bando pierda algunas batallas. Una de dos: o se produce una gran reacción que cambie las cosas, o viene la Parusía.
Totalmente de acuerdo. Es lo mismo que yo pienso.