El Arzobispo de Santiago se niega a responder las preguntas de InfoVaticana sobre el caso de los dos curas homosexuales

Gabriel Ariza 16 diciembre, 2016

El delegado de medios del arzobispado, Javier Aguado, responde al director de InfoVaticana: “¿Quién te has creído que eres para hacer preguntas a un obispo?”. El Arzobispado renunció explícitamente a ejercer el derecho de rectificación.

La noche del lunes 12 de diciembre, tras la publicación de la noticia sobre el escándalo de la diócesis del Apostol, Javier Aguado, responsable de medios del arzobispado, envió una nota a esta redacción en la que acusaban al director de este portal de “mendaz”, además de “calumniar e injuriar” al arzobispo.

Al recibir la nota, respondimos que no era una nota de rectificación y se instó al responsable de medios a enviar una nota de rectificación que cumpliera los requisitos formales exigidos por la ley. Javier Aguado se negó reiteradamente a hacerlo.

Sin embargo, ofrecimos otra alternativa: Le enviamos cinco preguntas relacionadas con el caso para que las respondiera el arzobispo, para incorporarlas junto con su comunicado íntegro.

Las preguntas eran las siguientes:

-. ¿Acaso todos los sacerdotes ordenados por d. Julian han vivido en el seminario durante el tiempo de formación, y por tanto sometidos a la disciplina de una convivencia permanente en un seminario diocesnao?

-. ¿O acaso no ha habido algunos que han recibido la preparación para el sacerdocio por vías “no convencionales” como la formación “a domicilio” por un curial?

-. ¿O acaso no ha habido ordenandos que el arzobispo conocía que vivian, convivían como pareja sentimental, "more uxorio"?

-. ¿O asegura Julian Barrio, poniendo a Dios por testigo, que ninguno de los ordenandos ha mantenido un “estilo de vida gay” durante el tiempo inmediatamente anterior a la ordenación?

-. ¿O es mentira que el arzobispo, después de ordenar a una pareja de hombres que convivía desde hacía años, les mantuvo en la misma parroquia para que pudieran seguir con su convivencia?


“Si me responde don Julián a las cinco preguntas, publico la nota integra”, terminaba mi correo. A los pocos minutos recibí una última llamada de Javier Aguado. Su respuesta fue clara: “¿Quién te has creído que eres para hacer preguntas a un obispo?”.

En cualquier caso, ante las dudas sobre la honorabilidad de este portal sembradas por el arzobispado de Santiago, y por portavoces oficiosos que se han hecho eco en las redes sociales del comunicado, InfoVaticana desea aclarar que:

InfoVaticana se ratifica en que la información sobre dos sacerdotes homosexuales ordenados por el arzobispo de Santiago de Compostela publicada por este portal el pasado lunes es veraz y ha sido debidamente contrastada.

El Arzobispo de Santiago ordenó sacerdotes a dos homosexuales sabiendo que eran pareja.



El Arzobispo de Santiago se niega a responder las preguntas de InfoVaticana sobre el caso de los dos curas homosexuales | Infovaticana


Esto es realmente grave, yo no soy experto en estas cuestiones pero tengo la convicción de que hay medios para acabar con esta situación. ¿Donde queda la advertencia de Cristo de "¡Ay de aquél que escandalice, más le valdría que le ataran una piedra de molino al cuello y lo arrojaran al mar...!" (Lc 17, 1-6)

En cualquier caso, una de la respuestas de un lector me parece muy elocuente por su referencia explícita al Can., 212, 219:


El obispo dice:

16 diciembre, 2016 a las 12:55 pm

“¿Quién te has creído que eres para hacer preguntas a un obispo?”. jjjuuuuuaaaassss

Javier Aguado: somos simples católicos que derecho canónico en mano EXIGIMOS, sí, Exigimos, una respuesta a todas estas preguntas. Y que el Sr. Obispo Rectifique o se largue a su casa, y de paso usted también. Grave, muy grave.

A ver, Sr. Javier, estudie el derecho canónico, consulte, por ejemplo el can 212, 219, sobre coacción a los laicos y varios otros sobre el asunto. Y también aquellos referentes a las obligaciones de los pastores y obispos para defender la integridad de la fe y la vida moral del pueblo de Dios a ese obispo y pastores encomendados.

Ya pueden ponerse las pilas y solucionar este asunto o largarse a sus casas.

Llamo a todos los lectores a escribir correos-e al obispado. Que tenemos derecho a recibir explicaciones y a que esto se solucione y a que los individuos implicados se les retire su condición sacerdotal.

A y Sr. D. Javier, menos chulerías.