Guy Verhofstadt, el 'ZP' belga: un gobernante dedicado a atacar a la familia y la vida humana

Guy Verhofstadt (a la derecha, en una visita oficial a España en mayo de 2004), primer ministro belga y líder del Partido Liberal Flamenco (VLD), ha demostrado en el Gobierno las mismas líneas ideológicas que sirven de directriz al Gobierno socialista de Zapatero en España. Manteniendo en todo momento una pésima relación con los Estados Unidos, Verhofstadt no dudó en aumentar las hasta entonces ya graves tensiones territoriales de Bélgica iniciando en 2001 un proceso de incremendo del grado de autonomía sobre la Constitución de 1993 que consagraba el modelo federal en Bélgica.

El 16 de mayo de 2002, y con el apoyo de sus aliados socialistas y verdes en la Cámara de Representantes, aprobó una ley de eutanasia, la segunda en el mundo después de la holandesa. Esta reforma, que entró en vigor el 23 de septiembre de 2002, despenalizaba la eutanasia activa de enfermos incurables, no necesariamente en fase terminal o con desenlace mortal.

Dos meses después, el Senado belga aprobaba a instancias del Gobierno el matrimonio entre homosexuales. A los pocos días, el 5 de diciembre de ese mismo año, se autorizaba la investigación con embriones humanos de menos de 14 días y la clonación por motivos terapéuticos.

El Gobierno belga quiere legalizar ahora la adopción por parejas del mismo sexo

La convocatoria de las asociaciones familiares belgas surge en este momento por el debate sobre la adopción por parejas homosexuales, que se está desarrollando a partir de una propuesta de ley presentada el pasado mes de diciembre en el Parlamento por el VLD del primer ministro Verhofstadt.

El VLD argumentó esta propuesta bajo la afirmación de que "la investigación y la experiencia práctica de los países que ya permiten la adopción por parejas bisexuales [sic] y del mismo sexo, muestran que los niños educados por padres del mismo sexo no se afectan de forma negativa", afirmación que han desmentido informes como el dado a conocer por HazteOir.org en España bajo el título de "No es igual: Informe sobre el desarrollo infantil en parejas del mismo sexo", realizado sobre estudios científicos que los propios colectivos gays suelen utilizar en sus argumentaciones.

Otra propuesta de ley de los socialistas flamencos de Alternativa Social Progresista (SP.A) de Patrick Janssens, socios del Gobierno, reclamaba también la adopción por parejas del mismo sexo, mientras que los Liberales Francófonos y el partido Demócrata Cristiano francófono se oponen a esa medida. El Gobierno podría alcanzar la mayoría parlamentaria, sin embargo, con el apoyo de los socialistas y de los verdes de 'Ecolo'.

La manifestación de las familias belgas

La web de Actiegezin - Action Famille ha publicado el manifiesto de la convocatoria. En él se defiende el derecho del niño "a nacer y vivir, o crecer, en el seno de una familia compuesta por un padre y una madre". En la citada web se recuerda, además, que "la estabilidad de una pareja, compuesta por un hombre y una mujer, es la mejor garantía para el desarrollo de los niños." Los ciudadanos que han organizado esta marcha denuncian, además, la falta de profundidad de los estudios psicológicos empleados por el Gobierno para plantear su reforma legal, pues se basan en meros cuestionarios que no sirven para medir los efectos reales de la convivencia de un niño con una pareja de homosexuales.

Los convocantes han hecho un llamamiento a las personas "de toda pertenencia política, filosófica o religiosa" a sumarse el 10 de septiembre de 2005, "a testimoniar que la familia es la primera de vuestras prioridades y que el niño debe ser el centro de nuestras preocupaciones." También han puesto en marcha una petición en la red para que los ciudadanos belgas puedan enviar emails a sus representantes a fin de pedirles que respeten los derechos de los niños.

A la manifestación belga ya han manifestado su adhesión el Instituto de Política Familiar y HazteOir.org, desde España, y el Instituto de Politique Familiale, desde Francia. El éxito de la convocatoria por la familia el pasado 18 de junio en Madrid ha servido de ejemplo para muchos países, siendo seguramente uno de los motivos que han animado a los ciudadanos belgas a salir a la calle para hacer oír su voz frente a los ataques contra la familia de su Gobierno.

Bélgica, uno de los pocos países donde las bodas gays son legales

En Bélgica, las bodas entre homosexuales son legales desde el 1 de junio de 2003, sin bien carecen de la posibilidad de adoptar niños. En estos dos últimos años, y según fuentes del Ministerio del Interior belga, sólo se han casado 2.422 parejas homosexuales en el país (la población homosexual en Bélgica podría rondar los 100.000 habitantes). Frente a esa cifra hay que destacar los más de 80.000 matrimonios entre hombre y mujer.

Las políticas antifamiliares y antinatalistas del Gobierno progresista belga han dejado su huella en la población y tendrán consecuencias en el futuro del país. Bélgica posee la menor tasa de matrimonios de Europa (4 por cada mil habitantes), por detrás de Eslovenia, con una de las tasas de divorcios más altas (3 por cada mil habitantes), sólo superada por Chequia y Lituania. En Bélgica el divorcio está permitido a los dos años de casarse, por lo que el Gobierno belga aún no ha podido ofrecer cifras siquiera del número de rupturas que se pueden haber empezado a producir entre las parejas homosexuales que han decidido casarse estos dos últimos años.</SPAN>
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