Estafa nigeriana
Saltar a navegación, búsqueda
La estafa nigeriana, o timo nigeriano, también conocida como timo 419 (por el número de artículo del código penal de Nigeria que viola), es un fraude. Consiste en un estafador que obtiene dinero de la víctima en concepto de adelanto a cuenta de una supuesta cantidad millonaria de dinero que se le ha prometido.
Existen muchísimos argumentos y variantes de la estafa, pero todos ellos tienen en común la promesa de participar en una gran fortuna, en realidad inexistente, así como también existen diversos trucos para que la víctima pague una suma por adelantado como condición para acceder a cierta fortuna.
La justificación generalmente es la de una millonaria herencia vacante que la víctima adquirirá, una cuenta bancaria abandonada, una lotería millonaria que la víctima ha ganado, un contrato de obra pública, o simplemente de una gigantesca fortuna que alguien desea donar generosamente antes de morir. Aunque las anteriores son las justificaciones más famosas, existen un enorme número de diferentes argumentos que dan origen a la existencia y donación de la suma millonaria. Algunos sostienen que la excusa de la lotería es la más común de todas.[1]
Este fraude está hoy especialmente extendido a través del correo electrónico no solicitado. Por ejemplo, la víctima podría recibir un mensaje del tipo "soy una persona muy rica que reside en Nigeria y necesito trasladar una suma importante al extranjero con discreción, ¿sería posible utilizar su cuenta bancaria?"
Las sumas normalmente suelen rondar las decenas de millones de dólares y al inversionista se le promete un determinado porcentaje, como el 10% ó el 20%. El trato propuesto se suele presentar como un delito de guante blanco inocuo con el fin de disuadir a los inversores de llamar a las autoridades.
Las operaciones están organizadas con gran profesionalidad en países como Nigeria, Sierra Leona, Costa de Marfil, Ghana, Togo, Benín y Sudáfrica con oficinas, números de fax y teléfonos celulares y a veces sitios fraudulentos en Internet.
Últimamente una gran cantidad de estafadores provenientes del África Occidental se han establecido en diversas ciudades europeas (especialmente Ámsterdam, Londres y Madrid, entre otras), como también en Dubai (Emiratos Árabes Unidos); a menudo se dice a las víctimas que deben viajar allí para cobrar sus millones, para lo cual deben primero pagar una elevada suma, que parece sin embargo insignificante si se la compara con la fortuna que los incautos esperan recibir.
A quien acepte la oferta, los timadores le enviarán algunos documentos (casi siempre archivos gráficos adjuntados a mensajes de correo electrónico) con sellos y firmas de aspecto oficial. A medida que prosiga el intercambio, pronto se le pedirá que envíe dinero o viaje al exterior para entregarlo personalmente, para hacer frente a supuestos honorarios, gastos, sobornos, impuestos o comisiones. Se van sucediendo excusas de todo tipo, pero siempre se mantiene viva la promesa del traspaso de una cantidad millonaria. A menudo se ejerce presión psicológica, por ejemplo alegando que la parte nigeriana, para poder pagar algunos gastos y sobornos, tendría que vender todas sus pertenencias y pedir un préstamo. A veces se invita a la víctima a viajar a determinados países africanos, entre ellos Nigeria y Sudáfrica. Esto es especialmente peligroso, porque en ocasiones el inversor puede acabar secuestrado o incluso muerto por el timador. En cualquier caso, la transferencia nunca llega, pues los millones jamás han existido.[2]
El timo debe su nombre a que buena parte del correo electrónico no solicitado conteniendo este tipo de ofertas fraudulentas, proviene de Nigeria.
http://es.wikipedia.org/wiki/Estafa_nigeriana
Marcadores