Misa satánica en Harvard y ola de 'terror' de judíos radicales contra los católicos

Bueno, bueno, Jasarhez, en tus dos últimos mensajes te contradices un tanto. Por mi no habría discusión si no fuera porque te empeñas en descalificar, juzgar y condenar, a los católicos de esta ¿noticia? Cuando en el follón que se debió montar y por lo que se puede leer en el texto de la misma, hubo gente no católica que también protestó. Y ahora vienen las preguntas incómodas: ¿qué tanto por ciento de católicos había? porque que se sepa en los EEUU son una minoría. Luego, ¿quién redactó la cartita para que la "gente en general" la firmase repudiando esa abominación? Además, aunque hubiese habido algún o algunos católicos entre los que la elaboraron, ¿se sabe si todos los católicos que estudian en dicha universidad son "modernillos" o cabe la posibilidad de que entre ellos también los haya tradicionalistas? por otro lado, ¿se tienen datos fidedignos con nombres y apellidos entre los firmantes que correspondan a algunos "católicos modernillos"? o sea, que estamos ante el problema de las generalizaciones a las que se añaden los anonimatos. Así pues, cuidado con los juicios temerarios, ojo con sacar conclusiones erróneas.

Procuro no dejar llevarme de los juicios temerarios especialmente cuando se tratan ciertos temas, y en otras ocasiones hay que evitarlos todo lo que se pueda. Mis opiniones en materia religiosa están basadas en una serie de libros que siempre (si, siem-pre) procuro tener a mano para consulta de dudas o para reflexionar yo mismo. Algunos ya los he citado en ocasiones, pero no todos. En uno de mis últimos mensajes en este hilo cité algunos párrafos del KEMPIS, posiblemente una de las mejores lecturas que se pueden hacer para tener siempre la postura adecuada cada día del año. Si recomiendo su lectura, lo mismo que la del Evangelio, no es por fastidiar, sino porque me doy cuenta de que muchos que se dicen católicos verdaderos, de católicos tienen poco. Y me doy cuenta de que están cegados respecto de si mismos y no ven lo que les pasa. Pero no soy yo quien los enjuicia de ese modo, sino que las respuestas surgen de la propia palabra de Cristo.

Entre esos libros hay uno que cité hace poco en un hilo que abrí recomendando que se vaya a misa con algún misal-devocionario. Concretamente se trata del que publicó el P. Luis RIBERA editado por REGINA en 1950 (mi ejemplar es de la edición de 1957). Tiene una parte que el autor llamó: "Un minuto de reflexión", compuesto por 124 artículos breves que tratan de todos los aspectos que atañen al católico, y cuya finalidad es su lectura diaria. En el número 50, titulado "El octavo mandamiento"(pág., 615) dice.

"Prohibe la mentira, el falso testimonio, la murmuración y el juicio temerario. La mentira puede ser para causar daño, para obtener alguna ganancia y para pasar el rato. Hay mucha diferencia entre una y otra. Falso testimonio es decir de una persona alguna cosa falsa ante el tribunal y ordinariamente con juramento. Nunca es lícito hacerlo. Calumnia es afirmar una cosa falsa de otro, más o menos grave según sea la calumnia y el daño que ocasione. Murmuración es descubrir una falta del prójimo, verdadera, pero oculta. Es también más o menos pecado según lo que se dice y el daño causado. Juicio temerario es pensar mal del prójimo sin sólido fundamento. Tiene tres grados: 1) la duda como diciendo ¿quién sabe? sin inclinarse a pensar mal; no es pecado; 2) la sospecha, inclinándose un poco, como diciendo: "podría ser"; no es pecado; 3) juicio temerario propiamente tal, o mala opinión, inclinándose ya a pensar mal; y es pecado.

Como verás estos artículos tienen una evidente finalidad, pues los fieles de la Iglesia solemos tener tendencia a olvidar el Evangelio, el Catecismo y lo que dijo el cura el domingo pasado. Somos como conductores de automóvil, que tenemos el carnet correspondiente y conducimos, pero nos hemos olvidado la teoría.
Entre 124 artículos muchos son los temas a tratar, y mira lo que se dice en el número 11, "El alma humana":

"En estos tiempos en que de todo se duda y todo se niega, también niegan algunos la existencia de nuestra alma..." (pág., 596)

Como se puede comprobar, ya antes del CVII existían los problemas que tanto angustian a muchos. A lo largo de este texto se tocan muchos aspectos de plena actualidad. El CVII contra el que se suelen cargar las tintas siempre, no fue sino el compendio de todas las "modernidades" que ya emponzoñaban la Iglesia y el mundo. Pero no todo en él fue negativo, pues al fin y al cabo entre sus participantes no todos eran "modernistas".

No tengo ningún inconveniente en dejar la discusión aquí, pero antes tengo que decirte algo más. Los satanistas, tal como ya expresé en uno de mis mensajes anteriores, representan la anti-religión, y expresan la inversión de todos los valores cristianos, son por definición una expresión del anti-Cristo y, por ello, son anti-teístas, o lo que es igual, a-teístas = Sin Dios. En resumidas cuentas, tanto da negarlo sin ofrecer nada a cambio, como negarlo a cambio de un demonio. Ambos casos representan la negación de Dios, por tanto, es ateísmo. Los satanistas son ateos, digan lo que digan, y esos tarados que han organizado esa abominación en esa universidad, son sinceros al afirmar que para ellos Satanás es una construcción metafórica.

Puedes seguir en tus "trece", pues al fin y al cabo se trata de tu opinión, pero no puedes modificar la mía y creo que acabo de darte algunas razones de peso. No obstante, no tengo interés en seguir polemizando no ya sobre los acontecimientos, sino alrededor de como aplicas tu juicio personal a una gente de la que realmente no sabes nada pero que si supones.

P.D. En el noticiario de las tres en TeleMadrid, en fecha de ayer, comentaron una noticia sobre que en uno de los municipos de los alrededores de Madrid, el ayuntamiento había reformado los nichos del cementerio municipal. Como consecuencia, alguien desconocido había aprovechado la ocasión para vaciar ilegalmente algunos nichos viejos y había apilado huesos de los cadáveres. Y, por tal causa, una presentadora del noticiario advirtió que "las imágenes podían herir la sensibilidad de algunos". Lenguaje periodístico.

Saludos.