El pasado sábado 23 de abril en el Palau Sant Jordi de Barcelona, tocaron siete grupos de lo más granado del separatismo catalán, incluso algunos con conocidas canciones filo-terroristas de apoyo a los presos de ETA, contra el cierre de diarios terroristas o contra la ilegalización de Batasuna. Entre los grupos presentes destacaron Dept., Lax ‘n’ Busto, Lluís Llach i Feliu Ventura, Quimi Portet, El último de la fila, Mesclat, Obrint Pas y la Carrau, - todoscon buenas subvenciones a pesar de su música-, todos vinculados en mayor o menor medida al entorno social del partido liderado por Carod-Rovira, ERC.

La Comisión 23 de Abril, impulsada por Plataforma per la Llengua, Acció Cultural del País Valencià, Coordinadora d’Associacions per la Llengua, Òmnium Cultural i Obra Cultural Balear se ha constituido como Comisión transversal de todas las innumerables asociaciones financiadas con fondos públicos.

Bajo la estructura de este concierto se esconde, además de la infinidad de subvenciones e intento de potenciación de estos grupos, la homogenización de la juventud catalana a la que se hace creer que más allá del nacionalismo no existe nada. Estas bandas, que por si solas son incapaces de movilizar público o vender cantidades de discos que las hagan sobrevivir, vierten en la mayoría de letras insultos con todo tipo de impunidad contra España, su constitución, la monarquía, etc...

En el manifiesto que publica la Comisión 23 de abril podemos leer frases como: “las administraciones de las naciones sin estado han de dar soporte sin complejos a la producción cultural propia y exclusiva del país”.

También leíamos: “Pedimos más facilidades para que los músicos en catalán,(no ya catalanes), tengan espacios o salas donde poder presentar sus creaciones, más apoyo, más soporte para la edición discográfica y para la distribución”.

Según ha podido saber Minuto Digital, tras acceder a documentos que así lo señalan, los únicos grupos que reciben apoyos públicos y a los que les es permitido tocar gratuitamente en salas de conciertos que dependen del consell de la juventud o estamentos públicos, son en un 99% grupos filo separatistas.

ALGUNOS JÓVENES CATALANES PROTESTARON CONTRA EL CONCIERTO

Un grupo de jóvenes catalanes, orgullosos de su catalanidad y españolidad, celebraron de manera especial el día de San Jordi, día tradicional de Catalunya. Fue en la comarca de Manresa, donde unos 150 jóvenes pudieron asistir a una fiesta amenizada por dos grupos de música catalanes que disienten del rodillo nacionalista. En la fiesta se recitaron también poesías de los grandes poetas españoles en lengua catalana como Jacint Verdaguer o Joan Maragall, y un pequeño trozo del Quijote por su IV centenario. La fiesta estaba apoyada por la Asociación juvenil Batzegada, organización de jóvenes católicos, implantada en diversas localidades catalanas.