España pide ayuda a la UE para romper el «boicot» marroquí a la cerámica valenciana
La Razón
18 de marzo de 2005
El comisario, Peter Mandelson, viajará a Rabat para acabar con un bloqueo que arruina al sector
A pesar de que Marruecos ya ha comenzado a adoptar una posición más flexible en la entrada de azulejos en el país alauita, lo cierto es que desde hace dos meses el sector azulejero se está viendo gravente afectado por dos medidas de carácter proteccionista que Rabat ha puesto en marcha: un proceso de salvaguardia y la necesidad de un certificado de calidad de los productos. Esta decisión está afectando gravemente al sector azulejero valenciano, por ello, la UE ya ha tomado cartas en el asunto enviando a Peter Mandelson, Comisario europeo, a Marruecos y a petición de España.
Madrid- Dos medidas «proteccionistas y contrarias a la Ley internacional», según asegura Comercio, han producido una nueva situación de crisis entre el país alauita y el Gobierno español, aunque más concretamente con los empresarios valencianos que han visto boicoteada la entrada de sus azulejos en el país norteafricano.
Por ello, la semana que viene, el comisario europeo, Peter Mandelson incluirá en su agenda la negociación con su homólogo marroquí para acabar con el bloqueo que desde hace meses sufre el sector azulejero en la frontera alauita. La inclusión de este encuentro en su agenda se ha producido a instancias de las autoridades españolas.
Desde el año 2003, España y Marruecos mantienen un acuerdo de Asociación-Unión, por el que los flujos comerciales entre ambos países se deben facilitar y mejorar. El 24 de enero el Gobierno marroquí publicó oficialmente la apertura de un proceso de salvaguardia contra la importación de baldosas cerámicas, rompiendo, de este modo el espíritu de este acuerdo.
Esta medida provocó la celebración de una audiencia pública el 1 de marzo a la que por parte de la UE asistieron la Comisión Europea, la Oficina Económica y Comercial de la Embajada de España en Rabat y Ascer (Asociación Española de Fabricantes de Azulejos y Pavimentos Cerámicos) y finalizó con con el logro de una posición más flexible por parte del gobierno marroquí, en lo que se refería a la entrada de los azulejos españoles.
La otra medida que ha boicoteado el paso de los azulejos, ha sido la exigencia en las aduanas de un certificado de calidad de carácter voluntario, la ISO 13.006 que el país alauita ha convertido en obligatorio para el caso de los azulejos.
El gobierno central está estudiando la compatibilidad de las exportaciones españolas en Marruecos y esta medida impuesta en sus fronteras. Según Alfredo Bonet, secretario general de Comercio Exterior, «este no es un problema para los azulejos españoles, ya que son de altísima calidad», aunque indudablemente el sector se está viendo muy afectado por la tramitación de este certificado. Además, Bonet añade que lo que ahora se esta investigando es si este control se aplica de la misma manera en los azulejos marroquíes, ya que «lo que no se puede hacer es exigirlo en los azulejos importados y no en los que produce Marruecos».
Se da la circunstancia de que las medidas adoptadas por Rabat, además, no se comunicaron previamente ni a la Unión Europea, ni a la Embajada española.
La situación ha provocado la indignación de la Confederación de Organizaciones Empresariales de la Comunidad Valenciana (Cierval), que ya ha anunciado que realizará una expedición a Marruecos para el próximo día 29, para trata directamente el problema.
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