Hoy día, la situación internacional ¿sería tan tensa que podría frustrar los juegos de China?.

de François de la Chevalerie

La cuestión parece chocante. Por lo menos, estremecerá a los que esperan con alientó el evento. Los chinos tienen una celebración ampliamente merecida después de tres décadas de esfuerzo y sacrificio. Desde 2001, los Juegos Olímpicos dominan el calendario económica chino. Ya las ultimas obras están por acabarse. Pocos imaginan lo impensable. Pero la anulación de los juegos no es nada nuevo. Ocurrió antes, por razones de guerra en 1916, 1940 y 1944, boicoteado por cincuenta naciones en 1980. Los eventos deportivos suelen ser afectados por los acontecimientos internacionales como lo demuestra el reciente aplazamiento de la carrera París Dakar.
Hoy día, la situación internacional ¿sería tan tensa que podría frustrar China de los juegos ?
Si la situación en Corea se suavizó, a la periferia de China, el Medio Oriente es explosivo como nunca. Guerras en Afganistán e Irak, inestabilidad creciente en Pakistán y Líbano, empeoramiento en Palestina, etc. Esta presentación no es nueva pero nunca los frágiles equilibrios parecen tan suspendidos a una tragedia. ¿Si a caso ocurre un ataque norteamericano en Irán, cuáles serán las consecuencias? ¿O un disturbio amplio en Pakistan? Los riesgos son numerosos. Sin embargo, la diplomacia china es poco voluntaria en la zona, más dedicada a la promoción de negocios que a fuerza de paz. Si Beijing privilegia las negociaciones con Teherán, no parece realmente involucrada en el porvenir de la región, como si el asunto no la tocara directamente. Pero, aun en su propio territorio, la ola de inestabilidad la puede afectar. Al extremo este de China, los uigures, minoría musulmana, inclinan a levantarse.
Otro elemento radica en el creciente malestar en Estados Unidos. "La cuestión China" esta en la mente de todos los consumidores, de los candidatos presidenciales. China posee 1500 mil millones de dólares de activos en los Estados Unidos, monopoliza varios sectores del mercado con sus productos. Heridos en su orgullo, algunos teorizan una confrontación directa. Si la situación económica sigue deteriorándose en Estados Unidos, vibraciones populistas podrían fortalecer unos activistas, los cuales suenan en dar una lección a los chinos. ¿Cuál mejor opportunidad que los juegos ?

Último punto, la estructura geológica China se caracteriza por una alta volatilidad. Combinado a la placa Eurasiática, la placa del Yangsté altera la región de Beijing. Los terremotos de gran magnitud ocurren regularmente. El de 1976 en Tangshan dejó un saldo de 250.000 muertos. Adicionalmente, la excesiva explotación de tierras aumenta la fragilidad de los suelos. Densamente poblada, el noroeste de China no está preparado para un desastre natural. Si sucede, ¿podrían cumplirse las condiciones de seguridad necesarias para celebrar el evento?

Nadie puede predicar el futuro, pero unos índices legitiman la reflexión, al menos, unas puertas de salida.