Se acabó la fiesta. La taurina. La otra, la de la jet, continuará. Las próximas autonómicas sólo le interesan al PP y al PSOE por esto de saber con quién hay que negociar los apoyos para que haya "gobernabilidad", término que revela la condición de "ingobernables" de los nacionalistas. Para los demás españoles, el que ocupe la Generalitat CiU o el Tripartit es igual.

Todos los partidos catalanes se han visto asociados en los casos de corrupción que han salido a la luz. Todos van a reclamar lo mismo al gobierno central. Todos darán uno o dos o tres o el número que puedan de pasos hacia la independencia.

Todos harán lo posible por prohibir lo que se les ocurra que es excesivamente español para ellos, desde el abanico hasta el chocolate con churros, desde el Tío Pepe hasta el orujo, que serán sustituidos a todos los efectos por el estupendo y telúrico licor Aromas de Montserrat, desde la zarzuela hasta las comedias de Arturo Fernández que se representan en el Paralelo, desde las peñas taurinas (que se extinguirán solas por falta de sentido) hasta el cantimpalo.

La lista puede ser interminable, porque Cataluña está tan llena de españoladas que los gobernantes podrán seguir prohibiendo sin límite alguno durante largas décadas, si no se les cae encima la Sagrada Familia con todos los japoneses que suelen encontrarse en el interior.

Texto: Horacio Vzquez-Rial - Se acab la fiesta: zona cero - La Revista de Agosto