Definamos LAICISMO, así lo podremos desenmascar.

Llevamos muchos años de laicismo, pero en la última década ha ido ganando muchas posiciones. Bajo el sustantivo LAICO, o bajo su adjetivación LAICISMO, se esconden toda una serie de corrientes sociales, personajes e individualidades que, por motivos de deseos de control de la voluntad ajena, o por razones vergonzantes como ser ateo, agnóstico, masón, marxista,...lo ocultan a los demás y se han arropado bajo este manto un tanto impreciso y difuso. Hoy cualquier cuestión se puede plantear como "políticamente correcta" si lleva el correspondiente sello "laicista", cuando lo cierto es que el factor común no es otro que el odio hacia todo lo que tiene de pura, limpia y sana la Fé en Nuestro Señor Jesús. Cualquier manifestación religiosa católica, digo CATOLICA,( no hablo de ninguna otra confesión cristiana, de ninguna otra religión no cristiana, o secta de cualquier género), es atacada, vilipendiada, fustigada, reprimida...por los más cínicos voceros de esta ideología revolucionaria marxistoide. De esta lacra social que se autodefine y presume de "demócrata" mientras pisotea y deniega los derechos ajenos a la libertad de conciencia y de Fé de los que creen en Dios.

Por supuesto, si además, la CATOLICIDAD es ESENCIA PURA DE LAS ESPAÑAS, qué más queremos para que toda esta laya de renegados se encuentren siempre en estado de alerta, a fin de reprimir, o cuando menos actuar como provocadores, ante cualquier síntoma o acontecimiento que se pueda escapar a su tendencia totalitaria. Por eso, ¿qué tienen de sorprendentes, noticias como la que hace unos días nos informaba que en un colegio de Zaragoza -la tierra de la Santísima Virgen del Pilar- han decidido no celebrar la Navidad? El amigo forero ARNAU lo comenta, pero la cuestión es ¿Y ustedes señores profesores (?) quiénes se creen que son para privar a los niños y sus familias de estas fiestas? ¿Son ustedes laicistas? Celébrenlo en sus casas, porque el colegio en cuestión es público, es decir, pagado con los impuestos que les sacan a los padres de los niños, lo mismo que sus salarios de cipayos.

Pero este sólo es un botón de muestra más de la hipocresía y el cinismo más abyectos, que se están instalando como un cáncer sobre la piel de Las Españas y que muy mucho me temo va a ser difícil, muy difícil de erradicar. A España la están convirtiendo en un estercolero social, si no la han convertido del todo ya. Observad las noticias, somos los primeros del Mundo en todo lo nefasto, en la podredumbre, ya sean drogas,abortos, prostitución, delincuencia, mafias, corrupción...; y los últimos en lo excelso con los más vergonzantes resultados en cuanto a moralidad, conocimientos básicos y científico-técnicos, de la Cultura e Historia propias, de la Lengua castellana y de las otras Lenguas, o en el desprecio a la vida, en la sociedad y en la Naturaleza, en la ofensa a nuestros mayores y, por supuestísimo en la ofensa permanente a Dios... de pura náusea. Y no lo olvideis en ningún momento, fomentado por el laicismo rampante aupado al Poder, bajo la dirección de unos políticos que...se sustentan sobre unas masas acéfalas absolutamente idiotizadas.

Allá donde encontréis signos de laicismo, ¡desenmascaradlo!, ponedlo en evidencia. Es la contrarreligión.

Para ampliar el tema:

http://hispanismo.org/religion/4032-ni-laicismo-ni-laicidad.html

Tenemos una corriente, o sumatorio de corrientes laicas que no eds mas que efectivamente el intento calculado y programado de despersonalizar a la población y crear animalitos consumidores de política concentrada y congelada.
Lo cierto es que existen planes a escala mundial con la globalización, sustentada en pequeños mercados o espacios integrados, que repiten la formula magistral adecuada a cada microespacio.
En la base de todo ello está la propagación de una cultura laica con una mentalidad liberal, una cierta clase de liberalismo, de atomismo, que posibilite la cxreación de microseres autónomos indefensos ante el poder del sistema mundial de pensamiento y de modelo económico.
Una consecuencia directa de ello es la destrucción de Estados-nación considerados caducos:no1: como el nuestro, ya que la t´ctica es dinamitar identidades nacionales y crear otras nuevas más pequeñas, atomizadas e indefensas ante el nuevo orden mundial.
Una visión de los mapas políticos en los diferentes continentes y la mayor o menor potenciación de fracturas existentes, creando otras nuevas ayudará a ver el objetivo último.
La batalla es difícil, ante una corriente impuesta de multiculturalidad e igualitarismo apoyado en el sempiterno amor a la "libertad", pero trasnformando dicho sentido y el concepto mismo, vaciándolo de contenido, sólo puro producto de consumo y a la vez nueva identidad, tan falsa como etérea.
A ello ayuda este laicismo, ya que es una arma más para dinamitar conciencias religiosas que relacionan y se emparentan conscientemente con una historia nacional concreta y ello no se acepta, hay que destruirlo como sea.
mi cuestión es el papel que presentan los partidos y movimientos políticos de izquierdas en todo ello, verdaderos vasallos del nuevo orden mundial, y una de la patas de la silla sobre la que se asienta el nuevo sistema. Esta es mi tesis.

Se han separado algunos mensajes fuera de tema aquí:

http://hispanismo.org/tertulia/4168-malentendido-semantico.html

DONOSO tienes toda la razón, volvamos al tema sin más.

Siguiendo tus indicaciones he leído el tema "Ni Laicismo ni Laicidad" que planteó TRADICION hace unas semanas. Lo encuentro muy ilustrativo, si bien da juego para muchos temas y debates. Pero, para no salirme de este tema de ahora, no sé si se exagera un tanto respecto al carácter liberal del LAICISMO, algo consustancial a dicha corriente ideológica en el XIX. Pero, en mi opinión, hoy en día es el marxismo el que se esconde detrás, y es que ya casi nadie acepta ese fósil totalitario, y bajo el disfraz laicista sigue planificando sus estrategias. Me fundamento para estas afirmaciones en que son siempre los mismos los que destacan en esta cuestión. Es uno de los temas favoritos de ese pintoresco personaje de nombre Llamazares, por ejemplo. No sé que os parece.