El goteo de chavales que irán acercándose con curiosidad al Tradicionalismo es algo inevitable y que sospecho que irá más. Desgraciadamente se están abriendo grandísimas brechas sociales. Los muchachos con algo en la cabeza y surgidos en familias no desestructuradas pero tampoco de la élite de poder va a haber un momento que no encuentren otro referente, aunque nunca les hablara nadie del Carlismo ni de qué es.
Écheseles un cable, cada uno en sus posibilidades.
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