El municipio de Osuna se localiza en el cuadrante sudoriental de la provincia de Sevilla, formando parte de la comarca de la Campiña y de las primeras estribaciones de la Sierra Sur. En 1.996 su población ascendía a 17.212 habitantes, la mayor parte de los cuales residía en el núcleo principal. El término cuenta con otra entidad de población denominada Puerto de la Encina. El asentamiento de la cabecera municipal se produce sobre una colina, posición topográfica que le confirió en sus orígenes un carácter defensivo.
La historia de esta localidad se remonta hasta hace unos tres mil años, cuando los iberos fundan la ciudad de Urso, nombre que hace referencia a la abundancia de osos en la zona. En época romana (Genitiva Julia) alcanza un gran esplendor urbanístico, cultural y militar, llegando a ser campamento de su propia legión. En el periodo musulmán se denomina Oxona, siendo conquistada en 1.239 por los ejércitos castellanos de Fernando III el Santo. En 1.264 es entregada a la Orden de Calatrava, que crea la Encomienda de Osuna. Por su situación estratégica, se convierte en un punto crucial para la defensa de la línea fronteriza con el reino nazarí de Granada. En el siglo XV, los caballeros calatravos ceden la ciudad de Osuna a D. Pedro Téllez de Girón, cuyos descendientes reciben el título de Duques de Osuna durante el reinado de Felipe II.

Sobre un primitivo poblado de época ibérica, y durante la República romana, los partidarios de Pompeyo construyen fortificaciones para defenderse de las tropas de César. Triunfante éste, se funda una nueva colonia algo más al sur, abandonando el viejo asentamiento ibérico e iniciando el proceso histórico de continuo desplazamiento por la falda de la colina hacia las tierras llanas meridionales. Genitiva Julia debió estructurarse sobre dos ejes urbanos fundamentales, el norte-sur, coincidente con el actual camino de la Farfana, y el este-oeste, con la vereda real de Granada.
Los musulmanes se asientan en el cuadrante suroccidental de la colonia romana. La ciudad medieval cristiana, al ser fronteriza, está amurallada y cuenta con cuatro puertas, en las salidas de los caminos y vías pecuarias: hacia occidente se halla la Puerta del Agua o de Teba, como penetración del camino de Sevilla; hacia el norte, la de Granada; hacia el sur, la de los Caños; y al este, la puerta Nueva. Como consecuencia de que el camino de Sevilla será el eje del futuro desarrollo urbano, el espacio del mercado existente en la Puerta del Agua se convertirá en la Plaza Mayor de la localidad. Las puertas norte y sur también se abren a sendas plazas, la de la Merced y la de Santa Rita.

En el siglo XVI se acomete la gran transformación urbana de Osuna. El viejo solar medieval se reserva para los edificios representativos, con la construcción de la Colegiata, el Sepulcro, la Universidad y el Castillo, al tiempo que el asentamiento residencial comienza a extenderse hacia el llano con calles que parten de las puertas de la ciudad vieja. Sobre el camino de Ecija y antiguo camino de Sevilla se va formando una de las calles más importantes, la Carrera, cuya continuación hacia Málaga y Granada fija el primer eje direccional noroeste-sureste. En la actualidad sigue siendo la vía más comercial y representativa de la localidad. También en ese momento se inicia otro importante eje direccional hacia el oeste, sobre la Vereda de Teba, partiendo de la Puerta del Agua y continuando hacia el este, constituyendo la hoy denominada calle Sevilla. En el siglo XVII se origina un esquema urbano con calles en abanico que parten de la calle Carrera y buscan la calle Sevilla.

En el siglo XIX, se conforma definitivamente la Plaza Mayor como centro de la localidad, con el Ayuntamiento como órgano de poder. Se va colmatando la trama urbana y se produce un crecimiento en altura con casas de dos y tres plantas. La llegada del ferrocarril y el aumento de la población en la primera mitad del siglo XX obligan a nuevas transformaciones urbanas, que se materializan en la construcción de barriadas residenciales periféricas de promoción oficial, y en un cierto desarrollo industrial en el sector sur (al borde del ferrocarril y de la carretera Sevilla-Málaga, actualmente Autovía del 92). En los últimos tiempos, se ha realizado una importante promoción residencial al noroeste, en el Ejido, con financiación pública, y que está produciendo el abandono del caserío de las zonas centrales más deprimidas.

Osuna es declarada en 1967 Conjunto Histórico-Artístico, destacando entre su numeroso patrimonio las iglesias y conventos de la Victoria (siglo XVI), San Carlos (siglo XVII), Real, Santo Domingo (siglo XVI), Consolación, Espíritu Santo (siglo XVII), Carmen, La Merced (siglo XVII), San Agustín, Concepción, Santa Catalina y San Pedro (siglo XVII), así como la Colegiata de Santa María de la Asunción (siglo XVI), el Museo Arqueológico, el Panteón Ducal, la Universidad (siglo XVI), el Museo de la Encarnación, el Hospital de Jesús, María y José, los palacios de Puente Hermoso, de Cepeda y de los Condes de la Gomera (todos del siglo XVIII) y la antigua Cilla del Cabildo (siglo XVIII )
Historia de
Osuna

Heráldica de
Osuna

notas:
A 85Km Sevilla
Gentilicio: Ursaonense
Tamaño: 590Km2
Altura: 325m (s.n.m.)
Comarca: La Campiña
Ríos: Peinado, Arrollo Salado.


os orígenes históricos de Osuna pueden situarse hacia el año 1000 antes de Cristo. Según Plinio Strabón y Ptolomeo, es de origen ibérico, lo cual se confirma por los abundantes restos arqueológicos, que la han identificado como la antigua "Urso", ya que en esta zona abundaban los osos por su gran diversidad forestal. Cuenta la leyenda que su fundación fue en el año 137 después del diluvio universal por decisión de la nieta del rey Hispano, aunque realmente fue bautizada y ocupada por el pueblo turdetano, cultura de la que proceden los famosos "Toros de Osuna", el alto relieve del "Soldado" y los "Relieves de Osuna", estos últimos encontrados en la finca el Garrotal en 1871por Francisco Ocaña, obras cumbres del arte ibérico, que se pueden admirar en el Museo Arqueológico Nacional en Madrid y en el Museo del Louvre en París, ya que actualmente en Osuna se conservan las reproducciones.

Del período de ocupación romano, Viriato consiguió derrotar inicialmente a Quinto Octavio Máximo, el cual una vez conquistada le otorgaría al municipio un escudo, el cual según diversos estudiosos se cree que era el más antiguo de España, aunque ha sufrido numerosos cambios desde entonces. Posteriormente, en la última etapa de la República romana, en la guerra civil aparece vinculada al bando de Pompeyo contra César, siendo éste el último reducto que se resiste a César. Tras su conquista, prospera como ciudad, otorgándosele numerosos privilegios con el estatuto de Colonia Genitiva Julia, tuvo su propia milicia o legión, la "Regio Ursuaria" con casi 7000 soldados según indica en una columna capitolina, acuñar sus propias monedas, además de los títulos de Nutrice y Civitas Inmune. La legislación y su ordenamiento cívico se recogieron en las tablas jurídicas conocidas como "los bronces de Osuna", por lo que se deduce que llegó a tener también una Universidad de Derecho. Estas tablas del siglo I a. C., hoy día se pueden admirar en el Museo Arqueológico Nacional situado en Madrid, aunque otras piezas se encuentran en Francia, en el Museo de las Antigüedades Nacionales de Saint-Germainen-Laye. Aunque en Osuna, se conservan numerosos vestigios y reproducciones en el Museo Arqueológico de la villa.

De la época visigoda y del período de dominación musulmana hay pocos datos, sólo quedan unos lienzos de la antigua muralla y una torre, conocida como la Torre del Agua, que parece que fue realizada durante el período de ocupación musulmana, y de la que se sabe que fue bautizada como "Osona" o "Oxona", aunque también pudo ser "Oxuna", pero a aparte de esta modificación en el nombre, no se han encontrado más restos de éste período.

Fue reconquistada por el rey Fernando III "El Santo" entre 1239 y 1240, pero en 1264, ante los problemas de repoblación y mantenimiento de fronteras, su hijo, Alfonso X El Sabio cedió la localidad en encomienda mayor a la Orden de Calatrava, de la que es Comendador mayor, titulándose "Comendador de Osuna", se encargaría de defenderla frente a las amenazas del reino musulmán de Granada.
Con la Orden de Calatrava, Osuna se repuebla, llegando a alcanzar en dos siglos cerca de 2500 habitantes.
Posteriormente siendo maestre de la Orden de Calatrava don Pedro Téllez Girón, entre 1445 y 1464, la villa es permutada por la orden por los estados de Fuente Ovejuna y Bélmez, siendo esta el centro del Condado de Ureña. Posteriormente, durante la monarquía de Felipe II (1556-1598), el V Conde de Ureña se convertiría por concesión real, en el primer Duque de Osuna en 1562, pero el deseo de ascender en el estamento nobiliario motivó que los Tellez Girón a partir de 1596 desarrollaran una remodelación urbanística de Osuna mediante la construcción de numerosos edificios de orden civil, religioso, académico,... como la Colegiata, Universidad, diecinueve Monasterios, cuatro hospitales y numerosas casas solariegas y palacios. Todas estas construcciones, modificaron por completo el municipio de Osuna que ya entonces era la capital del Señorío de los Tellez Girón en Andalucía.