Pues si Eduardo Jimeno levantara la cabeza y viera a lo que ha llegado el cine Español actualmente y, que sus máximos exponentes son un director homosexual, una actriz anoréxica y ninfómana y un actor oscarizado que le da lo mismo ocho que ochenta, yo creo que tiraba al Ebro la caja oscura de los hermanos Lumiere que trajo a España y se habría dedicado aprender a tocar la bandurria que se llevaba mucho por Zaragoza.