Desde luego parece interesante. Y es que Rusia es un país de grandes pensadores. Ahí está Solhenitnin, por ejemplo. Dovtoiesky o Tolstoi escribían gruesas novelas que para el gusto de muchos occidentales pueden resultar lentas y aburridas, el ritmo lento y reflexivo ese que dices que se opone a la acción típica de las películas de Hollywood, pero es que Hollywood es frivolidad comercial y superficial, mientras que esas largas novelas son en realidad profundos tratados filosóficos o teológicos, o al menos meditaciones en busca de la verdad, aunque no siempre acierten. Y además, la calidad literaria es innegable. Es interesante (aunque no sé si tendrá algo que ver o no) es que Rusia, por su relativo aislamiento de Occidente no padeció tanto las influencias negativas del Renacimiento.