Los madrileños llenan la Puerta de Alcalá de belenes en protesta contra Carmena
Decenas de madrileños han instalado pequeños belenesen la Puerta de Alcalá en protesta ante la decisión de la alcaldesa Manuela Carmena de suprimir el belén navideño municipal que se instalaba desde hace una década en la Plaza de la Independencia.
La protesta se está difundiendo a través de las redes sociales y y usuarios de Twitter están compartiendo sus fotos colocando los portales de Belén con la etiqueta #PontubelenPuertadeAlcala.
Quienes participan en esta protesta reprochan al Ayuntamiento que, al igual que en la Navidad del año pasado, no haya situado debajo del monumento madrileño un nacimiento y sí figuras geométricas luminosas, y reclaman el "respeto a las tradiciones y cultura de España", según uno de los carteles colocados junto a uno de los belenes.
Entre los diversos tipos de nacimientos situados debajo de la Puerta de Alcalá, también hay colocados dibujos infantiles, pesebres de todos los tamaños y banderas de España, así como carteles de "Welcome Jesús", "El primer refugiado" o "Reencuentro con la tradición".
Además, hay una carta en la que se asegura que "muchas de las personas que viven en Madrid" se sienten "orgullosas" de ser "católicos, cristianos y españoles".
La misiva finaliza solicitando al Ayuntamiento que no prescinda de los belenes y nacimientos "que tanto significan" y deseando "Feliz Navidad" a la alcaldesa.
En otra de las pancartas, se felicita las fiestas a "la gente de buena voluntad", así como a Carmena, al señalar que "al fin y al cabo son fechas de paz y amor, de reconciliación y de deseos de felicidad".
Los madrileños llenan la Puerta de Alcalá de belenes en protesta contra Carmena - MADRID ACTUAL
Siguen y siguen amontonando nacimientos. ¡Ole!
El pueblo se amotina contra Carmena: la Puerta de Alcalá, invadida por belenes
Es una auténtica rebelión, silenciosa y pacífica. Los madrileños han llenado la Puerta de Alcalá de nacimientos ante la negativa de Manuela Carmena de poner el belén que el Ayuntamiento solía instalar en la plaza.
El argumento de la alcaldesa no podía ser más demagógico: podía herir los sentimientos de los no cristianos. Eso sí, no dudó en mantener la bandera arco iris durante varios días para conmemorar el Día del Orgullo. Entonces, claro está, no cayó en la cuenta de que ese gesto podía herir los sentimientos de los heterosexuales.
En cualquier caso, no hay mal que por bien no venga y a Carmena le ha salido el tiro por la culata. Ha logrado algo que ningún otro alcalde de Madrid había conseguido antes, aunque lo ha hecho sin querer, claro está: movilizar a los ciudadanos para convertir la Plaza de la Independencia, a 50 metros del Ayuntamiento, en una de las mayores colecciones de belenes que jamás haya visto Madrid.
¿Qué decidirá ahora la podemita? ¿Enviará a los municipales para que los retiren? ¿Multará a los pérfidos ciudadanos que incitan al odio con sus belenes? Carmena, a ver si te enteras:a los madrileños nos gusta la Navidad.
El pueblo se amotina contra Carmena: la Puerta de Alcalá, invadida por belenes
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