Lo pongo en política, porque las cosas de Dios son todas las cosas, y porque me da la gana. Ya si el administrador considera debe ser movido, que me lo comunique o bien lo traslade.

Bien, ya hace largo tiempo, la situación de España es grave, no creamos que es novedad. Y creo que los que así pensamos debemos decir públicamente y promover a nuestro entorno, que lo que hay que hacer primero es rezar, sí, rezar, leyó bien; igual que oramos, imploramos por nosotros, nuestra familia, allegados, también se ruega por la Patria.

A ver que partidocracia constitucionalista de hoy, invoca estas cosas: ninguna.

Con lo que doy paso aparte, claro, que es muy serio y limpio, cuando se toma el nombre de un difunto, Santo, Santa, Dios, Nuestra Madre; como para juntarlo con letras cualquieras. Que eso ya lo hacen por demás a diario, en vano y en grave pecado de ofensas.

Ahora, que no se preocupen, que también rezaremos porque las almas del purgatorio y hasta del infierno profundo sean perdonadas. Porque eso nos enseño Jesucristo. Dios Mismo.