Pero hay que desenmascarar a estos tíos. Recuerdo que en 2001, la Doctora Judith Reisman publicaba un interesante y alarmante estudio que venía a poner de manifiesto la relación que existe entre homosexualidad y pederastia.
La relación es muy antigua. Hay que recordar, insistir en recordarlo, que la homosexualidad griega era en rigor pederastia. Cuando los homosexuales quieren buscar antecedentes históricos para "justificar" su práctica van a Grecia, poniéndonos como ejemplo esa civilización degradada moralmente. Pero pasan de puntillas sobre esta grave cuestión: el uranismo establecía que la relación "ideal" era la de un adulto con un efebo.
El estudio de la Doctora Reisman ponía de manifiesto que en EE.UU. los programas "educativos" llamados "programas de diversidad" habían fomentado entre los escolares la aceptación de las relaciones homosexuales como algo normal. Y por esa misma razón, homosexuales adultos encontraban más fácil la recluta de menores de edad, con los que practicaban sus aberraciones.
La Doctora Reisman era profesora de investigación de la American University, ha investigado muchos sobre pornografía y, considerada como experta, ha formado parte de la comisión sobre la pornografía del fiscal general de EE.UU.
Aprovechando la sensibilidad social que ha generado la trágica muerte de Mari Luz, estas cosas las tiene que saber la sociedad. Los programas "educativos" de "diversidad" y todas las "Educaciones para la Ciudadanía" terminan siendo "Educaciones para la Sodomía". Así es como se quiere normalizar un "paraíso" para los degenerados pedófilos. Un mundo que sea una despensa de niños para estos nuevos Gilles de Rais.
Un saludo a todos.
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