Es francamente vergonzoso. ¿Qué habrán hecho los herejes por Chile para que les den un día feriado, y menos a ellos que no celebran días de santos ni nada por el estilo ni creen en ello? ¿Tanta influencia tienen ya? ¿O no será que el gobierno socialista quiere ganarse sus simpatías y sus futuros votos, dado que aunque sean minoría ya son un porcentaje importante de la población, y no solo en Chile, sino por todo el continente? De lo contrario no se explica que con una presidenta agnóstica hagan estas cosas, no es que ella sea evangélica ni nada por el estilo. Estos hereje están echando a perder toda Hispanoamérica. Espero que otros países no imiten el ejemplo de Chile.

A propósito, que Lutero clavara sus famosas tesis en la puerta del castillo de Wittemberg probablemente no es más que una leyenda. Un mito fundacional del protestantismo.