Pues a mi lo mismo me da ser andaluz, que ser valenciano, que ser canario. No tengo ningún sentimiento regional, además éste es uno de los males de la España contemporánea.
El ser andaluz
El andaluz es o violento o artista o aventurero o cacique o esclavo, y siempre lleva un filósofo dentro. Puede tener eso hasta mezclado y mal digerido, si se quiere. Es espiritual, soñador y artista a fuer de ser completo y querer abarcarlo todo. Y por supuesto, no conoce términos medios. Ojalá las taras engendradas por el caciquismo exacerbado que se instaló en el liberalismo que, a través del infame Mendizábal y la colonia contrabandista de Gibraltar, tomó el sur como su cortijo para pagar la Guerra Carlista, esto es, el golpe militar desde dentro y para intereses extranjeros… Eso, ojalá esas taras que vienen de ahí y no de la gloriosa Reconquista vayan mermando y nos reencontremos con nuestras mejores virtudes, que nada tienen que ver con la estupidez sensualista, apática e intelectualoide pretendida por los mal llamados andalucistas de Blas Infante, que en no pocos casos, a imagen y semejanza de Antonio Gala, son forasteros que no entienden ni conocen la tierra y encima pretenden dar lecciones milenaristas. Dime de qué presumes y te diré de qué careces.
En fin, los andaluces así somos y así nos proyectamos y nos proyectaremos por más de medio mundo, constituyendo la quintaesencia expansiva de España. Pero para entender esto hace falta generaciones, mares y terrones corriendo por la sangre; y no embusteras y amaneradas pedanterías que al final lo que están buscando es vivir del cuento.
Antonio Moreno Ruiz
Andalucia Carlista
Pues a mi lo mismo me da ser andaluz, que ser valenciano, que ser canario. No tengo ningún sentimiento regional, además éste es uno de los males de la España contemporánea.
Es cierto Patriota sevillano que por una natural piedad filial debemos amar a nuestra Patria que como decía Cicerón es el camino para llegar al cielo.
También es cierto que este amor no debe impedir, sino al contrario, que esas Patrias sean parte integral de la Cristiandad.
Si bien hoy día ese Orden Político conocido como Cristiandad lamentablemente ya no existe.
Lo mismo podríamos decir de la Hispanidad, que fue el tronco más fecundo de la Cristiandad.
Pero ello no quita que también tengamos un sentimiento especial por la comarca, región, aldea, polis, o provincia en que hayamos nacido, o que nacieron nuestros padres abuelos, y demás.
Concuerdo plenamente contigo en que uno de los males más perniciosos que aquejan a España es ese enfermizo y estéril nacionalismo independentista que se da en gran parte de los Catalanes y Vascos.
Algo nefasto por cierto, es la revolución de los necios, propio de mentes atrofiadas.
Esto lo digo más allá de las bondades o cualidades personales de aquellos que pregonan esas ideas perniciosas.
De todas formas, a mi modesto entender, es saludable tener una sentimiento o morriña especial, por ese terruño más próximo a nosotros, obviamente si olvidar lo otro.
Pues a Dulcinea no la podemos olvidar nunca.
LA IDENTIDAD MÁS FUERTE DE ESPAÑA
-Dice Juan Carlos Monedero, esto es, nuestro Strelnikov, por supuesto, cabecilla de Potemos; que es que en España hay identidades más fuertes, como la vasca o la catalana, y que eso hay que respetarlo y habla del derecho de autodeterminación y tal. Claro, siguiendo la Prostitución del 78, hay "nacionalidades históricas", porque ellos lo valen. Por eso, como en la II República, quisieron autonomía sólo para ellos, y no para el resto; siendo León, Castilla y Murcia las regiones más perjudicadas con diferencia. Y la izquierda apoyando a las burguesías clasistas y racistas con tal de destruir España, con tal de llevar al paroxismo el odio por su propia sangre y cultura, pisoteando continuamente a los trabajadores que ve como clientes; con la complicidad, por supuesto, del "centro-reformismo que no quiero que me digan derecha"...
Pues bien señores, no es así: Yo digo, como lo supo ver el filósofo José Ortega y Gasset, que la identidad más fuerte de España es la andaluza, esa que de la que tanto se mofan día sí y día también los periodistas de Madrid y Cataluña, así como todos los separatistas y centralistas habidos y por haber. Llevo mucho tiempo diciendo que el día que los andaluces nos encabronemos de verdad, o cuando muchos se tomen el separatismo en serio, muchos van a dar mil duros por un agujero. Tiempo al tiempo...
ANTONIO MORENO RUIZ
EL SER ANDALUZ (II)
No soy filólogo, pero más que "dialecto" en Andalucía lo que existe es un conjunto de hablas, grosso modo, el andaluz occidental (Sevilla, Huelva, Cádiz y parte de Málaga), el oriental (Granada, Jaén, Almería y la mayor parte de Córdoba) y los llamados "acentos de transición" (Que van entre Córdoba, Málaga y Granada). Tanto pertenecemos a la lengua castellana o española (Como la denominó Covarrubias a principios del XVII) que el primer gramático de la lengua fue un andaluz, Elio Antonio de Lebrija. Y eso por no hablar de la cantidad de literatos que la han embellecido y enriquecido, y que de hecho lo siguen haciendo. El andaluz conserva cosas muy propias. No sabemos exactamente cuánto nos pudo influenciar la jarcha mozárabe, los valencianos dicen que a ellos sí... Y también muchos arcaísmos que ya no existen en Castilla (la pronunciación de la "ll, "me trujo" en vez de "me trajo"), amén de pequeños dejes que entraron de romances que se quedaron en el camino, como el bable, en el caso occidental (No es casualidad que en el pueblo los viejos dijeran "burricu"...) o de las fablas en el oriental. Escasos y concretos, sí, pero ahí están. Y bueno, las hablas andaluzas tienen una fortísima personalidad, un vocabulario, unas pronunciaciones/aspiraciones/giros, unos matices e incluso una utilización (los conceptos de humor, ironía y tristeza son riquísimos) muy singular, y su mayor (e ignorado) tesoro ha sido su directo influjo sobre Canarias e Hispanoamérica (En especial en el Caribe, aun también con notorias influencias en México y Chile) y que desde luego no están bien valoradas ni por los que dicen defenderla, derivándose hacia "exotismos" que nada tienen de históricos y sí de elucubraciones modernas, ni por otros, los separadores centralistas que se dan golpes de pecho con "España" cuando en verdad desprecian al país entero. Y es que los andaluces estamos hartos de que cada dos por tres nos menosprecie tanto la oligarquía separatista "catalana" como la prensa de "Madrid" con tantos tópicos y tantas basuras, cuando somos un puntal cultural de España y de hecho, los artífices máximos de la universalidad de la lengua.
Ahí quedó.
ANTONIO MORENO RUIZ: EL SER ANDALUZ (II)
EL SER ANDALUZ (III): DE LA BAJA ANDALUCÍA AL CARIBE.
-Hay mucha gente que por una cosa u otra, o bien no sabe, o bien no se quiere creer la afinidad que hay entre las hablas de la Baja Andalucía y los acentos del Caribe. Máxime cuando la identidad andaluza está tan falseada por el mal llamado andalucismo, que no es sino la falsedad del romanticismo extranjero (que nunca entendió esta tierra, y de hecho la utilizó para sus pésimos experimentos) llevado al politiqueo. Urge un regionalismo andaluz cultural como Dios manda, reivindicativo de nuestra ligazón para con Canarias e Hispanoamérica como una de las máximas premisas, alejado de exotismos que no existen más que en las calenturientas mentes de intelectualoides acomplejados y alienados.
Y es que estamos hablando de lo que debería ser lo más normal del mundo, pues no en vano, si Andalucía ejerce una influencia muy directa en el Nuevo Mundo a través de múltiples facetas culturales, como la arquitectura, en la fonética tuvo una intervención directa a través de las Canarias y el Caribe, pues fueron tierras pobladas mayormente por gentes del sur de España en un principio, y ese poso lingüístico quedó y se extendió. Y claro, yo sabía eso, pero llevando ya dos años en el Perú, cada vez que he cruzado con un cubano o un venezolano, he notado su acento bastante más próximo y contagioso. En una ocasión, llegué a confundir a un cubano como paisano por su forma de hablar... Y no pocos peruanos me han preguntado al escucharme hablar si soy caribeño, al no notar mi acento en lo que aquí se entiende como "español prototípico".
Y siguiendo con la parte práctica, al ver la película EL CARTEL DE LOS SAPOS me fijo en su banda sonora y hay una canción de un grupo llamado "Bomba Estéreo" que me llama la atención. Me pongo a bichear por youtube y me llama poderosísimamente la atención, no por su música (que, sinceramente, no es que me parezca gran cosa), sino por cómo cantan, es decir, por su acento.... Y es que parece que está escuchando un grupo de Sevilla o Cádiz o qué se yo... Afinidad, que no "exacta igualdad", avisando a las moscas cojoneras de turno. Pero bueno, pasen y vean lo que decimos:
En fin, el grandioso, sorprendente y entrañable nexo cultural que, desde la visión de un fervoroso andalucismo hispanista tuvimos el privilegio de defender cuando hablamos de la herencia hispanoamericana en el flamenco sigue y seguirá vivo, muy por encima del politiqueo que no nos da más que disgustos, y es por ahí, y gracias a gente como nuestros amigos del Instituto Ecuatoriano de Cultura Hispánica, que seguiremos trabajando por el hispanismo en su mejor y más amplio sentido, esto es, desde una perspectiva metapolítica (*).
EL SER ANDALUZ (IV): ESCRIBIR.
El problema es que siempre que se ha escrito sobre Andalucía se ha hecho desde fuera, no hemos tenido una respuesta desde dentro. Otrosí, la pseudo-reacción provocada por los dizque "andalucistas", aliñadas con las contradictorias teorías del filólogo Américo Castro y el politiqueo barato, parten de la misma y extraña base.
No, ya basta. Tenemos que escribir los de dentro, los de pueblo, los que sabemos coger las mentiras. Los que sentimos de verdad esto, y no los románticos de exóticos anhelos o los señoritos aficionados.
Es un reto, pero ahí está. Hay que ir hacia un andalucismo hispanista. Cuestión de historia y filosofía, cuestión de verdad, tradición y cultura.
ANTONIO MORENO RUIZ
“Por curiosidad, estuve bicheando el otro día una página dizque regionalista granadina. No parecía mala. Entre otras cosas, reflejaba el fracaso del andalucismo, más visible en algunas zonas (como la misma Granada) que en otras, a pesar de casi cuatro décadas de imposición, corrupción, caciquismo, subdesarrollo y mentira. Empero, pronto cantó la gallina. Muy pronto, subiendo artículos donde se habla del andalucismo como "socialismo sevillanista". Lo de siempre. El odio a Sevilla que no falte. No obstante, a saber:
-El andalucismo fue promulgado por Blas Infante Pérez de Vargas, malagueño, es decir, del reino de Granada. Luego Granada como región tiene una responsabilidad de primera mano en todo esto.
-¿Sevillanismo? ¿Os habéis fijado cuántos cargos de la Junta en particular y del andalucismo en general son jiennenses y malagueños?
-¿Imposición de Sevilla? Sevilla misma ha perdido muchas de su señas de identidad, hasta el atuendo. ¿Habéis visto los cuadros de Joaquín Domínguez Bécquer? ¿O los de su hijo Valeriano? ¿O muchos daguerrotipos de principios del siglo XX?
A tal punto que dejamos de usar el sombrero sevillano por el cordobés. Sin embargo, no veo a nadie en Sevilla quejarse de "imperialismo cordobesista". Si algún defecto tenemos los sevillanos es el ombliguismo, y pensar que estamos pensando en "imponer" algo en Granada, Jaén o donde sea es sencillamente desconocernos, porque a la gente de aquí le importa muy poco lo que pase o deje de pasar fuera de su pequeño mundo.
-Y bueno, tenéis una ciudad fantástica, maravillosa, que enamora nada más llegar. Yo mismo he dedicado no sé cuántas poesías a vuestra tierra y tengo un proyecto literario pendiente al respecto. Otrosí, los reinos históricos de Sevilla y Granada fueron desgajados en provincias artificiales; por cierto, por un tal Javier de Burgos, liberal de 1833, y que era de Motril. Otra responsabilidad más, como para hablar de "sevillanismo". Así las cosas, creo que vendría mejor asumir responsabilidades y luchar juntos contra la forrajera andalucista/alandalusista como hermanos y dejarnos de odios catetos que no son otra cosa que producto del "andalucismo" impuesto por una oligarquía que nunca explicó cuál era la doctrina real de vuestro paisano Blas Infante Pérez de Vargas. Y lo mismo digo para el ombliguismo sevillano. Y es que a pesar de los pesares, no han conseguido hacernos separatistas, ni que odiemos a Castilla, y la islamofilia barata no pasa de ser algo anecdótico/folclórico en este sur nuestro que de poniente a levante nos hace el punto estratégico más grande del planeta.
-28 de febrero: Nada que celebrar. Ni aquí ni allí. Pero por favor, con fundamento.”
Antonio Moreno Ruiz
La Iglesia es el poder supremo en lo espiritual, como el Estado lo es en el temporal.
Antonio Aparisi
Esto es dicutible, Blas Infante aunque malagueño de Casares vivió la mayor parte de su vida en Cantillana, Provincia de Sevilla, donde se casó y tuvo sus amistades.
Sobre los cargos de la Junta que muchos son jiennenses y malagueños, decir que, todos los presidentes de la Junta han sido de Andalucía Occidental: 3 sevillanos, uno de familia sevillana y nacido en Madrid, uno nacido en Tánger y otro nacido en Ceuta.
Saludos.
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