«Memoria histórica para todos». Eso reclamó Fermín Alonso Sádaba, presidente de la Hermandad de Defensores de Oviedo, que ayer disertó en la Biblioteca Jovellanos de Gijón sobre «La gesta del Simancas». «Ahora parece que ganaron la guerra quienes la perdieron», protestó el orador, cuya conferencia precedió a la de Julio García, presidente de la Junta Territorial de Combatientes de Asturias, que charló sobre «El Valle de los Caídos».
«La historia es como ha sido, no como quisiéramos que fuera, así que temo cualquier manipulación», abundó Sádaba, que calificó de «gloriosa» la resistencia del regimiento de zapadores del Simancas frente a un «torrente de doce mil milicianos rojos» que acabó por imponerse a los sitiados el 21 de agosto de 1936. El presidente de la Hermandad de Defensores de Oviedo concluyó su exposición con el soneto carlista dedicado «a los muertos por España», convertido en la oración fúnebre que el pasado 12 de octubre fue escuchada en Madrid durante el desfile de las Fuerzas Armadas con algunos versos alterados para «evitar la guerra de las banderas» y «no incomodar» a las víctimas del Yak, conforme explicó entonces el ministro de Defensa, José Bono.
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