No estimado Aquilífero, no merecen ser salvados, además, mis negrísimos nubarrones no están pensando precisamente en cómo salvarlos:

Es que yo soy otro como A. PÉREZ REVERTE, y salvo a dónde dirigía sus admiraciones hace 20 ó 30 años, en lo demás coincidimos. Y pienso que no podemos quedarnos quietos, que hay que hacer saltar todas las alarmas, "tocar a rebato", y empezar a reaccionar ¡ya!

¿La gente joven de la que hablas? esa no es juventud, esa es anticipo de jubilación, esa no es sino masa aborregada que precisa del "palo y tentetieso". Son parásitos.