Por eso mismo te digo que no se entiende nada, hermano Muñoz: el pregón debería darlo un santo varón electo por la comunidad catolica. Alguien destacado en la virtud, en las buenas obras, que se yo, un cúmulo de aptitudes que lo hagan merecedor de tal honor.
Por eso mi ironía final, la del Psoe en los seminarios.