MENSAJE DE SATANÁS PARA LA CUARESMA

Comentario sobre esta foto, arriba.


He tenido una entrevista con el diablo. Hace un rato. Como no podía ser menos, la cita la tuvimos en un mingitorio público. Le gustan las letrinas a este ángel cagado.



Satanás estaba allí. Todavía apesta a azufre, pero no tiene mal aspecto: se le ve muy convencional, siempre está a la moda. Hoy vestía el muy impostor con alzacuello. Me dijo que había estado felicitando a la Conferencia Episcopal Española. Y siempre que trata con curas (más por mofa carnavalesca, que por deferencia) se disfraza de cura: es un gran teólogo este Satanás.


Salí, tras tirar de la cadena. Me disponía a lavarme las manos en el lavabo, frente al espejo. Y se puso a mi lado. Se lavó las manos y dijo, como si pensara en voz alta:

-Siempre me acuerdo de Poncio cuando hago esto. -y se echó a reír.

-Pilatos, claro. -le dije yo.

Me miró, con esa mirada inquisitiva que él tiene. Y guiñándome el ojo, me dijo:

-Pilatos, sí.

Se puso a silbar la canción que le dedicaron con simpatía los Rolling Stones. Y volvió a la carga:

-¿Ves? ¿Para qué insistís, católicos españoles? Me habéis hecho mucho daño a lo largo de los siglos, pero ya está todo perdido para vosotros. Ahora, la Inquisición la establezco yo y yo soy quien os quemará. Bastante quemaron vuestros antepasados a mis siervos marranos y herejes. Destruí vuestro cordón umbilical con Dios, infiltrando las instituciones políticas y esa caverna eclesiástica. Vuestros políticos son todos míos, comen en mi mano y besan mi culo como otrora las brujas osculaban el ano del Cabrón. Y... Mira: Ni las altas jerarquías de la Iglesia se escapan. La Conferencia Episcopal no excomulgará al Rey, si éste firma una de mis Leyes más queridas. ¿Lo ves? ¿Qué me dices? ¿Por qué sigues creyendo en Dios? ¿Cómo puedes todavía manifestar públicamente que amas a la Iglesia Católica? ¿Cómo se explica que puedas respetar a los obispos, presbíteros y diáconos, cuando tantos escándalos están dando?

Continuará...


Maestro Gelimer

LIBRO DE HORAS Y HORA DE LIBROS