UN MENSAJE DE DIOS PARA LA CUARESMA
MASONES INFILTRADOS EN LA IGLESIA... ¡FUERA DE MI IGLESIA, MARRANOS!
Queridos traidores, amigos de Satanás y demás porquería, como todos sabemos, todo lo que se escribe es literatura, simple y mera literatura, así que espero que lo paséis bien con mi última creación. (Ni que decir tiene que todo lo que suene a mal, es para quien tenga que tomárselo a mal.)
Un mensaje de Dios para los masones que hay dentro de su Santa Iglesia: Se van acabando las cortesías, hijos de padre desconocido.
COMENTARIO: Antes de continuar contándoos mi entrevista con vuestro padre -a quien besáis el culete, masoncetes del mundo global (ver entrada más abajo), me veo obligado a comentar este documento gráfico, glosa que incorporo tras ver y leer la última aportación que nos hace nuestro queridísimo amigo, (pinchad en BANDIDO REALISTA). Invito a leerla para entender lo que viene a seguido. Seguiré transmitiéndoos lo que vuestro padre me comentó mientras ambos nos lavábamos las manos, tras mear. Por cierto, masones y clerigalla masónica, me recordó que no os quiere ni en pintura: le parecéis lo más despreciable de este mundo. Tenéis -según me dijo- un grave conflicto psiquiátrico: no habéis aceptado que vuestro padre Satanás os daba por el culo... Con una caña rajada.
La "in-dignidad eclesiástica" que posa entre esos dos enmandilados, masones de pacotilla: ¿quién es? ¿es un padre de familia, albañil de profesión, que vota PSOE o PP... y ese día en que se retrató estaba de Carnaval? ¿O es un cura de verdad? Y, por si fuere poco, éste -en el mejor de los casos, un petimetre-, va y posa con ese gesto afeminado de mariconazo rematado: ¿quién es este tipo? Quiero saber quién es ese sujeto. Y quiero saberlo, para hacerle una visita -si está vivo- y decirle cuatro cosas de parte de Dios.
1ª. La ha cagado.
2ª. No lo perdona.
3ª. Se va acabando.
4ª. Fuera de mi Iglesia... Sifilítico moral.
Pero, por lo pronto y sea quien sea: diré por escrito que me estoy acordando de todos sus mecenas y de sus madres (que en la gloria de las putas estén), pues: Vamos a ver: ¿a este degenerado quién le pagó los estudios de Teología? ¿Los Rothschild? Puede ser que hasta sea primo de ellos. Es lo que pasa desde que, para ser clérigo y dignidad eclesiástica, no se pide expediente de limpieza de sangre.
Que no piense ningún beato meapilas que aquí -en LIBRO DE HORAS- creemos en los curas, porque en quien creemos es en Dios, en el mismo Dios que los pondrá a todos en su sitio. Misericordia, Señor, pues hemos pecado. Esto significa que nadie nos compra. Ningún satanás mitrado puede creer, a estas alturas, que aquí vamos a respetarle sus mariconadas. Y afirmo, ahora mismo, que hasta los rojos anticlericales pueden ser más compasivos que nosotros -los auténticos católicos hechura de Santo Domingo de Guzmán- con esta chusma disfrazada de Obispo.
A basura que se retrata con masones la despreciamos más que a los mismos masones. Que se entere, por si está vivo este tipejo que aparece ahí haciendo melindres de bujarrón democrático, que no todos los católicos nos chupamos el dedo y sabemos reconocerlos, pues nadie digno de ser cardenal se retrata con esos dos botarates con mandil. Y si está compinchado con la chusma masónica, nos pedimos un lugar reservado para verlo arder en el infierno.
Miradle el careto... Ese gesto quebrado que no puede disimular: ese lánguido amaneramiento lo delata como un flojo irremediable, como una maricuela a "la" que se le caen las bragas. Yo diría que es un infrahombre más flojo que el pedo de un maricón. ¿Pero es posible que este sujeto sea clérigo? Ya tenemos la solución al enigma de los "curas pederastas": todos los curas pederastas eran maricones infiltrados por la masonería en el clero católico con el propósito de desprestigiar el Sacerdocio real y verdadero de los Santos Sacerdotes que hubo y todavía hay... Y, os vais jodiendo, habrá hasta el Fin de los Tiempos, heces de las logias.
Pero, insisto: quiero saber quién es el de la foto. Pues es un verdadero masón. Y si no me creen ustedes... Quiero saber quién es, pues todo puede ser que se trate de un masón disfrazado de "príncipe de la Iglesia" (en Carnaval sabemos que lo hacen).
Fíjense en sus dedos sobre la faja cardenalicia... Se trata de una señal de reconocimiento. El muy canalla estaba haciendo méritos ante sus jefazos que reirían la broma. Ese tipo es un masón, un auténtico masón. Y en su casa, su barragana o barragano no lo sabe.
Mi Dios, el mismo Jesucristo, me manda deciros que todavía estáis a tiempo de convertiros, pero que os queda poco.
¡Clero indigno... Tiembla! ¡No os toleramos!
¡Oh, Señor, esperamos tu Justicia tremenda! ¡Los que sufrimos bajo la tiranía de los miserables corrompidos queremos que te manifiestes!
¡Despierta, Señor, y destrúyelos para que no se pierdan más almas!
Por Nuestro Señor Jesucristo, que vive y reina por los siglos de los siglos, Amén.
Maestro Gelimer
LIBRO DE HORAS Y HORA DE LIBROS
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