Puerto Rico es hoy uno de los países más desarrollados de Hispanoamérica y el Caribe. Nuestro panorama social es un poco confuso para los que nos ven desde España. PR fue el único territorio español que no tuvo un movimiento independentista considerable, es más, los políticos puertorriqueños se enfocaron en conseguir la igualdad entre los súbditos de PR y los de la Península. Ese ideal lo lograron varias veces en el siglo XIX durante cortos periodos de gobiernos liberales. En 1812 un puertorriqueño, Ramón Power y Giralt fue vicepresidente de las Cortes de Cádiz y PR fue convertido en una provincia como cualquier otra. Como todos sabemos ese gobierno duró muy poco y Fernando “El deseado” eliminó la mayoría de las reformas de la Pepa. Ya sé que por aquí no son fanáticos del liberalismo español, pero en honor a la verdad tengo que decir que los periodos de más progreso económico para PR y también Cuba fueron cuando gobernaron los liberales. Los conservadores mantenían a PR en tremendo atraso social. El Partido Incondicionalmente Español de PR se opuso tenazmente a la construcción de escuelas y de una universidad y cualquier reforma que mejorara las condiciones de vida del campesino pobre era mal vista por los incondicionales. Con todo y eso hubo un notable progreso en el PR del siglo XIX alentado también por el comercio con EEUU y la emigración española y europea y la abolición de la esclavitud. En el 1897 se le otorga a PR la Carta Autonómica, se podría decir que Cuba y PR fueron las primeras “autonomías” que tuvo España. Esa carta amplió grandemente los derechos de los puertorriqueños que eran ciudadanos españoles y con todos los derechos y obligaciones de cualquier conciudadano peninsular. La luna de miel duró poco y en 1898 EEUU invade a PR, y que conste que PR nunca luchó para “liberarse” de España, y al ganar la guerra se queda con PR. Este, creo yo, es uno de los episodios más tristes de la historia puertorriqueña. Mientra que en Cuba y Filipinas se luchaba contra España, en PR se formaba una identidad nacional pero siempre ligada a España. Los puertorriqueños se sentían españoles y así lo dejaron dicho en escritos de la época. El puertorriqueño veía su cultura e identidad como una extensión de la española, claro está con influencias del indígena y del africano pero fundamentalmente hispana y católica. El sentimiento ante la invasión fue uno agridulce. El pueblo temía lo que pasaba y no entendía porque la bandera española ya no ondeaba en el ayuntamiento, mientras que los comerciantes españoles y criollos esperaban con ansias entrar al mercado estadounidense y lloraron poco la pérdida de España. Pasaron cincuenticuatro años para que PR volviera a tener autonomía propia. El gobierno “progresista” y “liberal” de EEUU negó a PR el derecho a gobernarse a si mismos, un derecho que la supuestamente “atrasada” monarquía española le había otorgado.
En esos años PR sufrió el más duro golpe cultural posible, se eliminó el español como lengua principal de enseñanza. Si bien es cierto que los “americanos” construyeron muchas escuelas y hasta una universidad e eliminaron la fiebre amarilla y otras enfermedades, también es cierto que trataron de “americanizar” a PR y trataron de impedir el desarrollo cultural de la isla. En esos tiempos la identidad nacional estaba aun en pañales y dependía de España para entenderse a si misma. De ahí surge la Generación del Treinta que trata de identificar el alma puertorriqueña y distinguirla de la española sin romper los vínculos que le unen. Fue un grupo intelectual importantísimo que hizo mucho por preservar la raíz hispánica del país. Fundaron la Facultad de Estudios Hispánicos y trajeron importantes intelectuales españoles como Pedro Salinas, Juan Ramón Jiménez y el músico Pau Casals (quien era de madre puertorriqueña) y muchos más. Algunos contribuyeron con su prosa (¡y dinero!) al bando nacionalista y al republicano durante la Guerra Civil, pero todos eran conocidos hispanófilos e hicieron grandes cosas por preservar el legado español en la isla. En los cuarenta PR se reafirma culturalmente y defiende el español como lengua madre, este es restituido oficialmente en los colegios (aunque hacia tiempo que heroicas maestras enseñaban solo en español cuando el ojo vigilante yanqui no estaba mirando) y comienza un gran movimiento autonómico que busca el desarrollo económico y cultural de PR dentro de una unión política con EEUU. Ese movimiento culmina con la creación del Estado Libre Asociado, y es creada una constitución que toma efecto en el 1952. El ELA es un status que permite el gobierno propio y autonómico dentro del sistema legal y político de EEUU. Se podría decir que el ELA esta entre un estado federado y una republica independiente. Los temas de moneda, defensa, tratados internacionales, ciudadanía e inmigración están delegados totalmente a EEUU. En PR funciona el sistema judicial federal americano pero este tradicionalmente no incursiona en temas locales, más bien en aquellos que tienen que ver con las leyes federales y que no son competencia del ELA. El ELA como quiera esta sujeto a leyes federales y el Congreso de EEUU es el que tiene la ultima palabra en cuanto al status de PR, eso ha creado que muchos autonomistas pidan mas soberanía dentro del ELA y también ha causado el crecimiento del sector asimilista que pide la anexion completa a EEUU. El sector independentista es culturalmente muy activo e importante pero la persecución que han recibido a través de su historia y el radicalismo de muchos de sus integrantes ha causado que no sea un sector electoralmente considerable, a penas llegan al 5% en sus mejores momentos.

Hoy Puerto Rico goza de un alto nivel de vida en Hispanoamérica y el Caribe pero comparado con EEUU o España, seguimos siendo un país relativamente pobre. Tenemos la mejor infraestructura de Hispanoamérica y un gobierno estable pero aun el desempleo es rampante y la emigración de puertorriqueños en busca de mejores empleos y una vida mas tranquila es grañidísima. Hoy habemos casi cuatro millones de puertorriqueños y descendientes de puertorriqueños en EEUU. El debate político en la isla consiste en la eterna pregunta del “status”. Algunos reclaman más autonomía para el ELA mientras que la otra mitad siente que solo la anexión puede traer el progreso económico que necesitamos. Puerto Rico luchó por seguir siendo España, pero España nos dio la espalda, y claro España tenia demasiados problemas como para tratar de luchar contra la voluntad de EEUU y no la culpo necesariamente, pero si me siento un poco traicionado que se nos abandonase después de haber luchado tanto para lograr ser considerados como españoles y cuando finalmente lo alcanzamos ¡PUN ahí esta! ¡Hasta luego nos vamos!
Hemos luchado férreamente para mantener nuestra cultura hispana y hasta los anexionistas reconocen que los puertorriqueños no negociaremos nuestras tradiciones para que los yanquis nos acepten como estado. Hoy mismo juramentó el noveno gobernador del ELA de PR, Luis Fortuño Burset. Fortuño es anexionista y para muchos representa los grandes intereses económicos de la isla. La Isla ha sufrido un embate económico desde haca años y muchos han puesto la esperanza en este joven abogado. Espero que no defraude a Puerto Rico. Díganme, ¿que piensan en España sobre nosotros? (si es que nos recuerdan).