«Eso de Alemania no solamente no es fascismo sino que es antifascismo; es la contrafigura del fascismo. El hitlerismo es la última consecuencia de la democracia. Una expresión turbulenta del romanticismo alemán; en cambio, Mussolini es el clasicismo, con sus jerarquías, sus escuelas y, por encima de todo, la razón.»
José Antonio, Diario La Rambla, 13 de agosto de 1934.
Correcto. El nacionalismo es un negocio de pingües beneficios, solo eso: una gran cantidad de familias y clanes caciques que viven a costa del descerebrado borrego sin ideales y cultura para manejarlo y moldearlo hacia la consecución de tal fin. No hay mas (ni aun volviendo el mismísimo archiduque Carlos iba a cambiar nada).
"De ciertas empresas podría decirse que es mejor emprenderlas que rechazarlas, aunque el fin se anuncie sombrío"
...además, de un nacionalista excluyente no puede brotar nada bueno porque su alma está totalmente podrida y carcomida por el odio. Es mala gente. Y cuando una persona es mala, lo es y lo será (salvo contadas excepciones) tengan fueros, tesoros o incluso el mundo.
"De ciertas empresas podría decirse que es mejor emprenderlas que rechazarlas, aunque el fin se anuncie sombrío"
Yo creo que has dado en el clavo empleando acertadísimamente la expresión correcta para denominarlos. Son 'clanes de caciques' que viven a costa de los descerebrados y borregos a quienes manejan. Incluso yo también diría que el mismo sistema autonómico no es otra cosa que el viejo sistema caciquil de los tiempos de Cánovas y Sagasta nuevamente legalizado e institucionalizado bajo el nombre de cada una de las 17 autonomías (fermento de los separatismos). ¿Qué otra cosa podríamos esperar de un régimen político regentado por un descendiente directo de aquella monarquía liberal que había inventado ese modelo?.
Cataluña, merced a su casta política (me refiero a la de todos, la de los separatistas y la de los supuestamente centralistas) la llevan de camino a un precipicio de honda envergadura. Ya no se trata del dinero, sino de salvar los trastos y asegurarse la poltrona en el futuro; sea éste el que sea. Los partidos de corte radical, los que siempre han querido al independencia más que el dinero (pues este lo cataron poco) son los que ahora gobiernan el barco de la política catalana y llevan a los exhaustos dirigentes de Mas con la lengua fuera en estos asuntos. Es cierto que los Duran y los Pujol y Mas se conformaban con más dinero de España, pero no sus socios, mas radicales y partidarios de la escisión total con España. ocurre igual que con la ETA (que ahora está durmiendo esperando las elecciones para ganar más poder machacar a su rival de toda la vida, es decir a España) busca el independentismo, no el dinero. Ellos mataron con tiro en la nuca por una Euskal Herria libre de "maketos" no por dinero..., y ahora, los radicales de ERC buscan conseguir, antes que los vascos, lo que los dos llevaban fraguando durante toda la transición. Las alarmas ya han empezado a saltar dentro del empresariado catalán. Este sector era antaño muy ambiguo con los estridentes cortes de manga de los políticos de separatistas a España, pero al mismo tiempo financiaban todas las campañas políticas que estos hacían en contra de Madrid. Ahora, los Lara, y los Bonet, viendo lo visto, ven que las ventas en su mercado español, en plena recuperación de la crisis, se les va a venir abajo, y las pérdidas no son tan asumibles como les habían contado los politicastros. Por su parte el rechazo internacional a una Cataluña libre es cierto en parte. No es cierto que todos estén en contra, (Israel y Marruecos ven con buenos ojos la independencia, es más, ya han abogado públicamente por ella) y Gibraltar, anima a los Británicos a que para alejar la presión sobre su trocito de roca se aumente los contactos con los separatistas (es decir, lo que lleva la Pérfida Albión haciendo con España toda la vida). En Hispanoamérica no vamos encontrar muchos aliados (Argentina, Venezuela y Colombia etc, no están muy por nosotros y si por expropiar todo lo que huela a dinero reconvertible fácil, y este problema del separatismo, les vendría que ni al pelo) por lo que la cuenta de aliados se reduciría, y tal y como opina Arturo Mas, de hecho, la UE debería de forzar la entrada de ese nuevo estado aún con la oposición de España. Es cierto que otros países, que también tienen problemas internos se negarían, pero ahí está el órdago sobre la mesa, y hoy por hoy, son pocos los que confían en la potencia diplomática de una España que ha pasado de ser una país independiente a un estado intervenido por la poderosa banca mundial. Es por ello que la escisión es un problema más real que hace unos años. Se puede evitar, eso es cierto, pero la fractura social que se ha abierto entre españoles y catalanes es más grande que nunca..., y eso favorece al separatismo, no lo dudemos. por otra parte, el sentimiento de hacer boicot a los productos catalanes está empezando a ser utilizado como algo aceptable por la gente sencilla de la calle, pues se ve como los catalanes, piden y piden, pero al mismo tiempo insultan e insultan, sin dar razones y sin explicar el problema de fondo. Como digo, esto no se solucionará con manifestaciones, sino con un duro revés para uno de los dos bandos en liza ¿cuál? el tiempo lo dirá..., dentro de un poco tiempo, nada más.
Conócete, acéptate, supérate.(San Agustín)
Y sí, si bien puede alguna minoría que se crea realmente que España ha invadido Cataluña y ese tipo de cosas, quienes dirigen el independentismo en Cataluña simplemente quieren más dinero. ¿Cuánto más dinero? Siempre más. Son liberales elementales. Y la única razón por la que los liberales del estado central les pelean, es porque no quieren perder dinero. La unidad o los fueros les da lo mismo a todos.
Aquí corresponde hablar de aquella horrible y nunca bastante execrada y detestable libertad de la prensa, [...] la cual tienen algunos el atrevimiento de pedir y promover con gran clamoreo. Nos horrorizamos, Venerables Hermanos, al considerar cuánta extravagancia de doctrinas, o mejor, cuán estupenda monstruosidad de errores se difunden y siembran en todas partes por medio de innumerable muchedumbre de libros, opúsculos y escritos pequeños en verdad por razón del tamaño, pero grandes por su enormísima maldad, de los cuales vemos no sin muchas lágrimas que sale la maldición y que inunda toda la faz de la tierra.
Encíclica Mirari Vos, Gregorio XVI
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