Bruselas, 26 noviembre 2011, festividad de San Silvestre, abad, y San Pedro de Alejandría, obispo y mártir. (Corresponsal). Desde el pasado jueves el profesor Miguel Ayuso, director científico del Consejo de Estudios Hispánicos Felipe II y presidente de la Unión Internacional de Juristas Católicos, ha visitado el País Bajo borgoñón, para comenzar la tarea de reconstruir los lazos que propició la Catolicidad en la etapa --gloriosa-- en la que aquellas provincias estaban unidas a la Monarquía hispánica.

A su llegada a Bruselas, capital de la corte presidida en su tiempo por el Gobernador de los Países Bajos y hoy de la absurda y deletérea Unión Europea, el Profesor Ayuso almorzó en el Círculo Real del Parque con representantes de las grandes casas familiares asociadas históricamente a la administración de aquellos territorios desde Madrid, tales como el Príncipe Roberto de Mérode y el Conde Juan de Lannoy, pero también con el Conde y la Condesa Beltrán van der Stegen de Schrieck, el Barón y la Baronesa Roberto Pangaert d'Opdorp y el Señor y Señora De Muyser Lantwyck, descendientes del escabino de Vaalbeek y Duque de Brabante. Bendijo el cordial ágape el arzobispo Jacinto Berloco, Nuncio Apostólico de Su Santidad en Bélgica y Luxemburgo. Asistieron igualmente el presbítero William Hudson, del Instituto de Cristo Rey Sumo Sacerdote; el Embajador Héctor Riesle, los Caballeros Georges van Erck y Paul Vandenberghe, el investigador Stéphane Wailliez y su esposa, y los abogados Steffen Ryom y Miguel Toledano.

Tras los postres, el profesor Ayuso y el señor Toledano se desplazaron en tren al Condado de Holanda, con el fin de planificar in situ la fase preliminar en orden a la sucesión legítima al Trono de las Españas. Sin perjuicio de la ejecución de etapas posteriores, quedaron satisfactoriamente delineados al final de la tarde los requisitos adecuados a la continuidad dinástica y a la fidelidad a la doctrina política española, incluyendo la referencia expresa, efectuada en la reunión, por este orden, a las figuras señeras de la Infanta Doña María Francisca y del Abanderado de la Tradición, continuadores íntegros en la actualidad del depósito imperecedero del Carlismo.

Al día siguiente, el Presidente de la UIJC visitó las ruinas del Palacio de Coudenberg, donde el Emperador Carlos V --el Rey Carlos I de Castilla y Aragón y IV de Navarra-- firmase la abdicación en favor de su hijo Felipe II, y donde los archiduques españoles Alberto e Isabel Clara Eugenia estableciesen su corte para el ejemplar gobierno de aquellos Estados. Seguidamente, tuvo lugar un encuentro con abogados y magistrados representantes de la Hermandad de San Ivo de Kermartin; el profesor Ayuso previno de la necesidad de que los juristas católicos no resulten contaminados por el modernismo o el sentimentalismo, especialmente en estos tiempos en que la Archidiócesis de Malinas recibe tantos y tan taimados ataques auspiciados por la masonería y el liberalismo.

En la tercera jornada del viaje, festividad de San Juan Berchmans --onomástica del llorado don Juan Vallet de Goytisolo, presidente que fue del Consejo de Estudios Hispánicos Felipe II-- el profesor Ayuso se desplazó hacia el Condado de Flandes, invitado a la boda de la señorita Karolien De Turck con el joven Gillis De Troyer, miembro de la Asociación Académica Católica tradicional Lovania Leuven. El sacramento del matrimonio, otorgado en la Iglesia de la Natividad de Lebbeke (Onze-Lieve-Vrouw-Geboort) precedió a la Santa Misa celebrada en ese bello templo según la forma tradicional del rito romano. Además de tomar contacto con seguidores del abate Georges de Nantes en aquellas tierras, los españoles asistentes al enlace tuvieron la oportunidad de charlar con los numerosos estudiantes interesados por el Carlismo y su doctrina, procedentes de Lovaina, Gante y Brujas, entre los que se encuentran Stijn Calle, Maarten De Troyer y la señorita Liesbeth Ronsmans, Heitor Serdieu, Michael Cross, los hermanos Robin y Rien Vandenberghe, la señorita Nele Uytterhoeven y Bruno Daems.

Para cerrar los actos previstos, el Presidente de la Unión Internacional de Juristas Católicos cenó con un nuevo grupo de juristas flamencos, coordinados por el abogado Frank Judo, de Bruselas, y acompañados por el Padre Benedicto Walliez, Superior de la Hermandad de San Pío X en el "Benelux". El profesor Ayuso animó a los asistentes a lograr la adhesión de las actuales Bélgica y Holanda a las otras entidades nacionales ya actualmente representadas en la UIJC, para servir desde el Derecho a la Santa Iglesia Católica, con plena fidelidad a su Magisterio de siempre. Como de las anteriores gestiones, se esperan frutos abundantes de ésta, para la urgente restauración de la Cristiandad en Occidente.Agencia FARO