Los gitanos checos temen salir a la calle tras una violenta manifestación neonazi
EFE | PRAGA
18-11-2008
Los miembros de la comunidad gitana de la República Checa temen salir a la calle después de la violencia desatada anoche por un grupo de neonazis, que se enfrentaron a la policía que les impedía el acceso a un barrio gitano de la ciudad de Litvinov, lo que causó 16 heridos.
"Hay mucho miedo. La gente vive en el miedo y no es fácil", declaró a Efe Milena Adamova, que colabora con la organización no gubernamental "Partnersczech" en proyectos de integración de gitanos.
Dieciséis personas resultaron heridas y quince fueron detenidas el lunes, en la ciudad norteña de Litvinov, tras enfrentarse un millar de policías y casi seiscientos radicales de extrema derecha del Partido Obrero (DS). "Fue una locura. El hecho de que hubiera tan pocos heridos debemos atribuirlo a la profesionalidad de la policía", explicó Adamova.
La marcha de los extremistas, que se inició el sábado, estalló ayer al mediodía y recordó por su virulencia las protestas contra la globalización convocadas en Praga en 2000 con ocasión de la cumbre del Fondo Monetario Internacional.
Los neonazis trataron de entrar en la colonia gitana de Janov, cuyos accesos estaban bloqueados por un millar de policías y antidisturbios, dotados de helicóptero, carros blindados y tanques de agua, para hacer frente a los cócteles molotov y piedras, en una batalla campal que duró caso dos horas. También ayer hubo una marcha ilegal en Koprivnice, al noreste, donde jóvenes enmascarados y vestidos de negro gritaron los eslóganes "defensa y nación".
Fiesta nacional por la Liberación del Totalitarismo
Estos incidentes empañaron la fiesta nacional por la Liberación del Totalitarismo, con el que se recuerda la manifestación estudiantil del 17 de noviembre de 1989 que propició la caída del régimen comunista. "Tenemos informaciones no oficiales de que los extremistas planean una marcha en Chomutov la semana próxima, y nos defenderemos", señaló la activista gitana, que junto a su hija fue recientemente agredida por un grupo de extremistas.
Consideró que la política "tibia" del Gobierno checo facilita este tipo de violencia. "Es una vergüenza que el Gobierno permita estas marchas. Tendría que haber legalizado hace tiempo al Partido Obrero y al Movimiento Nacional de Oposición, que cada vez tienen más simpatizantes", dijo.
La vicepresidenta del Gobierno, Dzamila Stehlikova, del Partido Verde (SZ), trató de impulsar una nueva ley contra la discriminación, que fue vetada por el presidente, Vaclav Klaus. "El hecho de que discriminar sea sólo una falta y no un delito penal, como hasta ahora, no nos ayuda. No quiero decir que el Gobierno no haga nada por nosotros, pero los efectos de esas políticas son nulos", apostilló Adamova.
http://www.abc.es/hemeroteca/histori...330280267.html
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