De las tecnologías de vanguardia a la ganadería en estado puro. Esta mañana se han repetido, en Madrid, las viejas prácticas de la Trashumancia. Más de un millar de ovejas han recorrido algunas de las calles centricas de la capital. Esas calles y avenidas, antes de ser vías urbanas eran, y son, cañadas reales con derecho preferente de paso para el ganado.

Un año más, el campo toma Madrid. El tradicional y simbólico paso del ganado por la que fue y sigue siendo Cañada Real, puso color a la día gris con el que despertó la capital. Ambiente festivo con bailes y banderolas que sedujeron a turistas y vecinos de la zona: "Esto no molesta", asegura un vecino del centro de Madrid, "Todo lo contrario es un espectáculo bonito y amable".

Los hombres del campo traían peticiones de todo tipo, aunque la que prima es el respeto por las vías pecuarias y una mayor contribución para luchar contra los incendios. En este aspecto reclaman las creación de 55.000 puestos de trabajo destinados a paliar la quema de bosques y montes en España.

Además nos recordaban usos y tradiciones que todavía se mantienen como el vígaro que se utiliza para comunicarse entre pastores en las montañas.

Al llegar a la puerta de Alcalá, foto junto al mojón que recuerda la necesidad de las vías pecuarias para el paso del ganado.