El trato que se les da a los bolivianos en Argentina, Brasil o Chile es atroz.

Con esto no defiendo a los españoles pero hay que decir que "en todos sitios cuecen habas".

El trato a los bolivianos es especialmente despectivo en Buenos Aires donde los "bolis" no viven en barrios como los "sudacas" en España sino en gethos de miseria donde solo obtienen trabajo temporal como esclavos.

En la frontera de Corumba en Brasil he visto tratar a la gente como animales. Un policía brasileño de esta frontera, de raza negra para más señas, fue destituidos por dar patadas e insutar a diario a los bolivianos que se sentaban junto a la ventanilla de declaración de la aduana del país. Además del trato vejatorio y los golpes, no les dejaba ni dormir. Otros empleados del servicio de aduanas se reían.

Afortunadamente también hay gente buena en todas partes y un "kiosquero" de la misma estación de Corumba lo denuncio y consiguio que los expulsasen.

Hay que mirar la viga en el ojo propio antes que en el ajeno y los españoles luchar contra el racismo pero tampoco que vayan de imbéciles acomplejados por la vida que con todo y DIN DUDA, es el país con mayor moral cristiana del mundo y hay quien le quiere sacar partido al cuento.