En primavera estuve en Irlanda en un viaje muy intenso que me permitió recorrer una muy buena parte del país y conocer a muchos irlandeses.
Salí de España con la impresión de que me iba a encontrar con un país hipercatólico, artificialmente gaélico (como ocurre hoy en el País Vasco con el euskera) y mayoritariamente proetarra (tal es lo que nos inculcan los Otegi & Cia.).
Me encontrá con un país de catolicismo presente pero en recesión, con escasos rastros de cultura gaélica y proespañol. Y te digo proespañol, porque creo que en níngún país de Europa hasta el momento me había sentido tan bien acogido POR SER ESPAÑOL.
En fin, es óbvio que no conocí a todos los irlandeses y que probablemente mi visión como todas esté sesgada, pero debo decir que desde ese viaje ha mejorado mi estima hacia ese país.
Por otra parte Valmadian, coincidencia plena con lo que has escrito, como en la mayor parte de las ocasiones.